El Diario de SonoraCDMX
Tener una cita con alguien no siempre es fácil. Por ello, cada vez hay más aplicaciones móviles y webs para buscar pareja o para encontrar el amor. De hecho, las apps de citas se han convertido en una vía cada vez más común para conocer gente.
Y, debido a que todo el mundo está usando este tipo de aplicaciones, es difícil evitar su uso. Por ello, para ayudarle a navegar por todas las opciones que hay, hemos elegido algunas de las aplicaciones más populares, junto con nuestras opiniones sobre su accesibilidad, sus ventajas, sus debilidades y todo lo demás. Así que ahora ya sólo nos queda esperar a que la flecha de Cupido funcione.
Tinder
En primer lugar, con Tinder necesitas tener una cuenta de Facebook, y tienes que ser mayor de 18. Y una vez habilitada la app, podrás configurar un perfil que consiste en un bio de 500 caracteres y hasta de seis imágenes (sugerimos incluir siempre una foto).
También puedes vincular la cuenta de Tinder a tu Instagram e incluir información sobre tu trabajo o estudios.
Además, en la configuración podrás establecer algunas preferencias con respecto a quién ves. Después, empieza la verdadera diversión.
Tinder te mostrará una foto, un nombre y una edad. Podrás tocando la foto acceder a más información adicional sobre dicha persona y si compartís algunos amigos en Facebook.
También puedes optar por deslizar el dedo hacia la derecha si te gusta o a la izquierda si no es así o usar uno de tus “me súper gustas” para mostrar que tienes verdadero interés.
Si tú le gustas también a la otra persona, aparecerá una pantalla que te mostrará que habéis coincidido y te permitirá, entonces, enviarle un mensaje. Aunque la mayor parte del tiempo te la pasarás pasando por diferentes perfiles como si estuvieras cambiando de canal mientras ves la televisión.
Cabe destacar que Tinder realmente tiene una de las mejores interfaces de usuario si se compara con cualquier aplicación similar. Las fotos son grandes, la aplicación está bien y la creación del perfil es bastante sencilla.
En general, Tinder recibiría un sobresaliente por su usabilidad. Además, nadie puede enviar mensajes a menos que también haya expresado interés, lo que significa que no recibes mensajes que no te gustaría recibir. Además, muchas personas están realmente dispuestas a encontrarse en la vida real, lo que no siempre ocurre con este tipo de citas. Asimismo, Tinder es posiblemente la aplicación de citas más popular.
OkCupid
OkCupid es una de las pocas aplicaciones de citas que no requiere tener una cuenta de Facebook para registrarse.
Simplemente, creas un nombre de usuario y rellenas un perfil muy largo, que puedes vincular a tu cuenta de Instagram. Puedes contestar a preguntas, y lo que te gustaría que respondiera tu pareja ideal.
Esto crea una puntuación que refleja tu “compatibilidad” con alguien. También puedes optar por hacer públicas tus respuestas.
Todas las opciones, incluidas la de acceso a los ajustes y los perfiles de visualización, se encuentran en un menú deslizante.
Para buscar a alguien, simplemente tienes que acceder a la opción “coincidencias”, que, curiosamente, no te muestra las personas con las que hayas coincidido, sino con las que podrías coincidir.
Si esa interfaz es demasiado caótica, puedes elegir la opción “quickmatch”, que restringe los resultados a las fotos solamente. Entonces podrás señalar si te gusta alguien o no y enviar un mensaje como con Tinder, pero los usuarios sólo pueden quienes están interesados en ellos sólo si se encuentran en el estado “A-list“.
OkCupid tiene tantos inconvenientes como Tinder. La interfaz es extremadamente torpe y las fotos son un poco pequeñas. También tienes que tocar la pequeña imagen de un usuario para ver su versión más grande y el perfil de la persona, que es simplemente demasiado grande para una aplicación.
Podría funcionar en un sitio web de citas, pero tanta información resulta excesiva en una aplicación. Resulta además algo tedioso mantener un registro de lo que ya has visto. De hecho, es peor aún, no puedes ver a quién le has gustado a menos que pagues una actualización.
Lamentablemente, sólo podrá ver a las cinco personas que hayan visitado tu perfil más recientemente a menos que pagues por una actualización y, lo peor de todo, cualquier persona puede enviarte un mensaje.
Coffee Meets Bagel
Es otra app que va ligada a Facebook. Así, una vez que hayas configurado tu perfil e introduzcas tus preferencias, te enviará un “bagel” al día, que es, básicamente, un pefil que podría encajar con tus gustos. Después, tendrás unas 24 horas para decidir si te intera o no este “bagel”.
Si te gusta, y tú le gustas a esa persona, entonces estaréis conectados, lo que significará que podréis enviaros mensajes en un chat privado.
Este espacio para chatear expirará en ocho días, tanto si has hablado o no con tu bagel.
También podrás ganar “beans” que te ofrecerán más funciones.
Además, el servicio también ofrece opciones de preferencia más específicas, lo que significa que podrás restringir las búsquedas teniendo en cuenta ciertas creencias religiosas o etnias, si es que realmente estas cosas son importantes para ti.
La app te permitirá cargar hasta nueve fotos y tener un perfil mucho más prolífico. Y el hecho de que la opción para chatear expire después de una semana pone cierta presión a que intercambies números o te encuentres en la vida real con la otra persona con la que has conectado.
Asimismo, la interfaz es también relativamente fácil de usar, con fotos grandes y una sensación de limpieza.
Sin embargo, las apariencias pueden ser engañosas. Aunque Coffee Meets Bagel permite una gama de preferencias super específicas, el bagel que envía puede o no puede coincidir con tus preferencias.
La aplicación también puede resultar algo molesta con las actualizaciones y los tiempos de carga un tanto lentos y, a veces, es frustrante que te envíe sólo un “bagel” al día. Aunque es verdad que puedes acelerar un poco las cosas con la opción de “give & take”, pero te costará unos 385 “beans”.
El ritmo lento y la manera de contactar realmente con alguien hace vuelve muy pasiva la aplicación. Además, una vez que te gusta alguien o conectas con alguna persona, Coffee Meets Bagel te pedirá que especifiques tus razones para hacerlo.
Hinge
Hinge es como Tinder. Bueno, en realidad, es demasiado parecida a Tinder, pero con algunas diferencias clave que la hacen un poco superior.
En cuanto a la interfaz, eso sí, parece la hermana menor de Tinder.
Sin embargo, en cuanto a las funciones, se basa más en tus amigos de Facebook para hacer conexiones. Hinge, además, te conecta a través de amigos de amigos de amigos y te muestra no sólo las personas que tenéis en común, sino también todas las cosas que compartís. Esto lo consigue tras responder a un montón de preguntas a través de una interfaz similar a la de Tinder. ¿Has estado en Berlín? Desliza a la derecha. ¿No juegas croquet? Desliza a la izquierda. De esta manera, responder al as preguntas resulta mucho más fácil y requiere de menos tiempo, además de ser más divertido.
Asimismo, las preguntas no son tan obvias como las de otras aplicaciones.
Y si quieres saber más sobre alguien, siempre podrás preguntarle a ese amigo que tenéis en común. Por otra parte, la gente sólo te puede enviar mensajes si ambos estáis conectados. Y podrás ver qué relación busca cada usuario y aunque esto no suene como algo súper revolucionario, en eso Hinge se aparta un poco de las expectativas de Tinder.
Además, debido a la conexión de amigos de amigos, es menos probable que encuentres fotos inapropiadas.
También cabe destacar que sólo podrás agregar fotos de ti mismo desde Facebook o Instagram, aunque eso puede limitar un poco si no eres muy activo en ambas redes sociales.
Tastebuds
Tastebuds es una aplicación de citas basada en los gustos musicales para determinar el grado de compatibilidad con alguien.
Puedes vincularla a tu cuenta de Facebook o no, según tus preferencias. También puedes hacer que tu perfil sea tan detallado o escaso como quieras.
Los límites de caracteres para cada pregunta, que en su mayoría se centran en la música, son bastante amplios.
Una vez completado este paso, podrás desplazarte a través de perfiles individuales para ver toda la información que alguien ha incluido, incluidos los clips de canciones de los artistas que le gustan.
Y puedes señalar un “like” a una persona si estás interesada en la misma y si no es así, simplemente podrás “saltarla”. Incluso puedes enviar una canción o un mensaje a los usuarios antes o después de que coincidan contigo.
Además, la experiencia en general es agradable. La interfaz de usuario es limpia y simple, y la creación del perfil no es demasiado complicada, permitiéndote utilizar tanto fotos de Facebook como de tu ordenador o de otras redes.
De hecho, incluso si algunos perfiles son un poco largos, nunca son engorrosos y sólo incluyen lo que realmente resulta interesante. Escuchar la canción que le gusta a una persona mientras te desplazas por su perfil también es un buen añadido.
Y la verdad es que mucha gente usa la aplicación para encontrar amigos o conocidos para ir a conciertos, aunque también para tener alguna cita. De todas las apps para conocer a gente, sin duda tener en cuenta los gustos musicales parece la vía menos arbitraria.
Desafortunadamente, Tastebuds también tiene sus inconvenientes. No hay forma de ver a todas las personas con las que has coincidido: solo aquellas con las que has iniciado alguna conversación.
Y la aplicación sólo reproduce partes de algunas canciones y ocasionalmente se detienen, lo cual resulta un poco molesto. Posiblemente nuestra mayor queja con Tastebuds, sin embargo, es que es muy fácil saltar accidentalmente alguien sin querer.
Omitir involuntariamente a alguien resulta demasiado fácil por la forma en la que está establecida la aplicación.
Match.com
Match.com estaba en el top ten de servicios quedar y contactar con gente mucho antes de que se lanzara en su versión móvil.
Y, afortunadamente, no es necesario que inicies sesión en Facebook para registrarte o acceder a esta app. Sin embargo, sí que deberás pasar por un proceso de registro que te obligará a añadir algunas fotos, responder a algunas preguntas sobre tus preferencias y crear un nombre de usuario y contraseña. Las mismas credenciales de inicio de sesión funcionarán además con la versión de escritorio del sitio.
A la hora de flirtear, Match enviará a alguien un “guiño”, de manera que podrás buscar a través de la base de datos de Match.com para encontrar a quién quieres guiñarle un ojo.
El servicio también te proporcionará conexiones personalizadas o te recomendará posibles candidatos o candidatas diariamente, según tus intereses.
Sin embargo, para aprovechar al máximo Match.com, necesitarás una suscripción. La opción más barata actualmente disponible te costará $ 21 dólares al mes durante seis meses.
Así, una suscripción premium te permitirá ver quién ha visto recientemente tu perfil, a quién le han gustado sus fotos, así como muchas otras características.
La interfaz de Match.com es muy elegante y minimalista, pero no es tan fácil de usar como, por ejemplo, Tinder. Utiliza un conjunto de pestañas que aparecen en la parte superior de la pantalla, como “coincidencias” o “búsqueda” que dividen las diversas funciones del servicio. No es una aplicación demasiado complicada, pero tardarás un poco más en acostumbrarte.
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