CDMX
En México cerca de 4.9% de la población tiene alguna discapacidad y una gran parte de los casos se relacionan con discapacidad visual, por lo que se requieren acciones que les permitan acceder a servicios de comunicación e información para tener una mejor calidad de vida.
De acuerdo con Belén Ruiz, catedrática de la Escuela Politécnica Superior de la Universidad Carlos III de Madrid, existen diferentes tipos de discapacidad visual como ceguera, visión reducida o defectos relacionados con el color que provocan dificultades al momento de percibir una interfaz gráfica, ver o leer o simplemente para entender información que suele ser presentada a través de colores.
A lo que se añaden discapacidades auditivas como sordera o zumbido en los oídos que incapacitan a las personas a percibir información sonora y deben apoyarse de lenguaje de señas, subtítulos o alertas luminosas.
“Incluir a las personas con discapacidad evita la segregación e integrar a las personas con discapacidad en entornos y servicios nos van a permitir que puedan verificar todos sus derechos tal como dictamina la convención de la ONU de todas las personas”, consideró al participar en la Jornada por la Accesibilidad Audiovisual IFT.
En su experiencia, lo que se necesita son leyes o normas que impulsen esa inclusión e integración, mientras que las tecnologías deben ser una herramienta que ayude a las personas a tener accesibilidad a la información.
Ruiz resaltó que existen tecnologías como lectores de pantalla, funciones de autodescripción, pantallas de Braile, opciones para modificar los colores dependiendo de la discapacidad como puede ser el daltonismo, subtítulos o implantes cloqueares.
“Si bien ya existen mecanismos de tecnologías asistidas para facilitar la transmisión de información y la recepción de comunicación, aún existen diversas barreras que dificultan el acceso para estas tecnologías”, agregó el comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), Ramiro Camacho.
Dichas barreras suelen ser el elevado costo de los dispositivos y la falta de consciencia general de su disponibilidad, por lo que el IFT busca encontrar y establecer mecanismos efectivos que garanticen la accesibilidad audiovisual.
“¿Cuáles son las alternativas que tenemos para solucionar los retos de inclusión de la manera más pronta? Me gustaría poner especial énfasis en mantenernos en vanguardia en la investigación, desarrollo e implementación de nuevas y mejores soluciones tecnológicas que nos permitan reducir la brecha de accesibilidad y consumo de contenido audiovisual por parte de personas con discapacidad”, dijo.
DESARROLLOS
Ruiz coincidió en que la tecnología tiene que suplir mediante otros canales estas dificultades, por lo que estas soluciones deben ser desarrolladas teniendo en cuenta características como ser flexibles, que puedan ser usadas por personas con diferentes capacidades, que se adapten a las habilidades de cada persona de manera individual, sencillas e intuitivas, entre otras.
A lo que se deben añadir otras acciones, por ejemplo, en España se están dictaminando nuevas normas técnicas para la calidad de subtitulado, audiodescripción y lengua de señas.