Egipto
El Ejército advirtió que reprimirá cualquier tipo de violencia en manifestaciones.
Miles de manifestantes que piden el regreso al poder del presidente depuesto Mohamed Morsi se manifestaron el viernes en El Cairo, al tiempo que el ejército advirtió que reprimirá cualquier tipo de violencia e hizo énfasis en ello al enviar cazas de combate sobre la capital.
Jóvenes activistas que iniciaron las protestas masivas que llevaron a la remoción del mandatario islamista a manos del ejército se reunieron en la Plaza Tahrir de El Cairo y afuera de dos palacios presidenciales para celebrar sus victorias, lo cual generó temores de que se produzca una nueva ronda de enfrentamientos en la capital.
Mohamed Ibrahim, el ministro del Interior a cargo de la Policía, emitió un comunicado en la página de Facebook del ministerio en el que advirtió a los partidarios del presidente derrocado no acudir a la Plaza Tahrir, y a ambos bandos no cometer actos de violencia.
Las manifestaciones rivales tienen lugar pocos días después de que tomara posesión un nuevo gabinete que incluye mujeres, cristianos y miembros de una coalición liberal que se opone a Morsi, pero no a los islamistas.
La Hermandad Musulmana, el partido al que pertenece el presidente derrocado, se ha negado a participar en conversaciones con el liderazgo interino.
El país se ha polarizado mucho en torno al golpe militar del 3 de julio, el cual fue apoyado por millones de personas que acusaban al primer líder de Egipto elegido democráticamente de abusar de su poder y dar demasiada influencia a la Hermandad.
Los manifestantes pro Morsi ondeaban el viernes banderas egipcias y fotos del líder derrocado, al tiempo que coreaban consignas contra el jefe del ejército, el general Abdel-Fatá el-Sisi.
“¡El-Sisi es un traidor!”, gritaban las multitudes. “¡Morsi es nuestro presidente!”
“Los problemas de los primeros años podrían haberse resuelto con diálogo, pero la oposición siempre se negó”, dijo Osama Youssef, de 28 años, quien viajó a El Cairo desde la provincia de Sharqiya, al oriente del país, para mostrar su apoyo a Morsi. “La oposición no logró conseguir el poder a través de medidas constitucionales, por lo que optó por tomar el poder mediante un golpe de Estado militar”.
Partidarios de Morsi, principalmente islamistas, realizan una protesta frente a una mezquita en el este de El Cairo desde que fue derrocado, y el número de participantes aumentó el viernes tras una convocatoria de la Hermandad.