Islamabad, pak
Un atacante suicida se inmola cerca de un hotel frecuentado por chiíes en la ciudad.
Al menos ocho personas murieron y otras 42 resultaron heridas hoy en un atentado suicida perpetrado cerca de un hotel frecuentado por chiíes en la ciudad de Peshawar, en el noroeste de Pakistán, informaron fuentes oficiales y de la Policía.
El suceso tuvo lugar a primera hora de la noche en el barrio de mayoría chií de Kucha Risaldar, cuando el insurgente detonó los explosivos que portaba en un chaleco, explicó un oficial local de Policía, Rizwan Khan, al medio paquistaní Dawn.
El ministro regional de Salud, Shaukat Yousufzai, confirmó a los medios el número de muertos y heridos y reveló que “seis de los fallecidos han sido identificados”.
Según un alto mando del equipo de artificieros, Shafgat Malik, el atacante empleó unos seis kilogramos de explosivos en el atentado, y los agentes supusieron que se trataba de un acto suicida después de hallar en el lugar los brazos y piernas del insurgente.
Entre los heridos, que fueron trasladados al hospital Lady Reading, hay cinco niños y dos mujeres, y muchos de ellos estaban cenando en el restaurante del hotel en el momento del atentado, de acuerdo con el diario local “Express Tribune”.
Ese atentado se produjo tan solo horas después de la cancelación de la primera reunión entre emisarios del Gobierno y del mayor grupo talibán de Pakistán, Tehrik-e-Taliban Pakistan (TTP), aplazada por discrepancias sobre el grupo que representaría a los insurgentes.
Peshawar es la capital de la violenta provincia de Khyber Pakhtunkhwa, fronteriza con Afganistán y refugio de células talibanes, grupos yihadistas y organizaciones mafiosas que operan a ambos lados de la línea divisoria con el país vecino.
La ciudad es escenario de buena parte de los actos violentos que se registran en el país asiático y es considerada uno de los núcleos de la actividad armada en Pakistán.
De acuerdo con un reciente informe de un centro de análisis local, el Instituto Paquistaní para Estudios de Paz, el año pasado murieron 685 personas, en su mayoría chiíes, en más 200 atentados dirigidos a las minorías religiosas del país.
Se estima que Pakistán es el segundo país del mundo con mayor población chií, unos 40 millones de personas, solo por detrás del vecino Irán.