LONDRES, ING.
Rachel Gow sentía temía no haber formado una familia, según la investigación sobre su muerte.
Una joven mujer británica se quitó la vida en noviembre pasado debido a la depresión que le causaba no estar casada y no tener hijos a sólo meses de llegar a los 30 años de edad, según la investigación sobre su muerte.
Rachel Gow, de 29 años, y quien trabajaba como administradora de un hospital en Lancashire, creyó que su vida no iba por buen camino y que otros familiares estaban en una mejor situación que ella, reportó Metro.co.uk.
Debido al temor de que su novio Anton Tsvarev, de 30 años, la dejara, la joven se despidió de él enviándole un mensaje de texto en el cual le deseaba “lo mejor en su futuro” y luego se quitó la vida en su casa.
Según la investigación de su muerte, sus problemas comenzaron en 2011 luego de que su madre murió de cáncer a la edad de 66 años.
Según un testimonio leído en la corte, luego de la muerte de su madre, Rachel “pasó por un periodo de independencia. Conoció a Anton y ambos estaba muy felices”. Él entonces se mudó a casa de la joven y aunque tuvieron problemas como todas las parejas, ella quería casarse.