BEIRUT, LIB.
Siria inició el quinto día del alto al fuego con algunos ataques aislados en distintas partes del país, donde el nivel de violencia se ha reducido desde el comienzo del cese de las hostilidades.
En el hecho más violento, al menos 18 miembros del Frente de los Revolucionarios, incluidos cuatro de sus dirigentes, murieron en un atentadocontra una de sus bases en la provincia meridional de Al Quneitra, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
La ONG precisó que un coche bomba se estrelló contra un cuartel del Frente de los Revolucionarios en el pueblo de Al Asha, cerca de la frontera con los Altos del Golán ocupados por Israel.
La fuente no descartó que el número de fallecidos aumente porque hay varios heridos graves.
Por el momento, ninguna organización ha reclamado la autoría de este atentado.
El Frente de los Revolucionarios es un grupo rebelde moderado, que, no obstante, ha luchado en el pasado junto al Frente Al Nusra, filial siria de Al Qaeda, en Al Quneitra contra las fuerzas del régimen.
A su vez, aviones de guerra, de origen desconocido, bombardearon la pasada madrugada una zona agrícola en la ciudad de Al Tamanea, en la provincia septentrional de Idleb, según el OSDH.
Además, dos cohetes disparados por las fuerzas del régimen impactaron en los alrededores de la localidad de Al Skaik, mientras que la artillería de las autoridades también tuvo como objetivo la urbe de Yisr al Shogur, en la misma provincia.
Al amanecer estallaron combates entre los efectivos leales al Gobierno de Damasco y el Frente Al Nusra -filial siria de Al Qaeda- y otros grupos armados en Kabana, en la región de Yabal Turcoman, situada en el norte de la provincia costera de Latakia.