La ciudad de Miami se vio sacudida por una tragedia sin precedentes cuando un incendio de tres alarmas estalló en un edificio de apartamentos de cuatro pisos. El alcalde de la ciudad, Francis Suárez, describió el evento como un "gran incendio", con una magnitud que no se veía desde hacía 25 años, mientras los equipos de rescate se esforzaban por salvar a los residentes atrapados en el edificio.
No solo era un incendio
La situación se tornó aún más desgarradora cuando las autoridades confirmaron que, junto con el incendio, se encontró a un hombre baleado justo afuera del edificio de apartamentos. La incertidumbre sobre si el tiroteo y el incendio estaban relacionados solo agregó más caos a la escena.El hombre herido fue trasladado de urgencia al Centro de Trauma Ryder del Jackson Memorial Hospital en estado crítico, mientras que un residente fue hospitalizado por inhalación de humo y tres valientes bomberos también necesitaron atención médica.
Mientras los bomberos continuaban su ardua labor en un ataque defensivo debido a la peligrosidad del incendio, más de 40 personas fueron rescatadas del edificio en llamas. La escena era caótica, con residentes siendo evacuados a Lummus Park y posteriormente trasladados al Parque José Martí, donde recibirían alimentos y otros suministros esenciales.La Cruz Roja Americana coordinaba los esfuerzos de vivienda y medicamentos, mientras que la oficina del alcalde se encargaba de proporcionar alimentos a los afectados.
En medio del humo y las llamas, la valentía de los equipos de rescate y bomberos era evidente, arriesgando sus vidas para salvar a los residentes atrapados en el edificio. La comunidad de Miami se unió en solidaridad ante esta tragedia sin precedentes, mientras las autoridades trabajaban arduamente para esclarecer los sucesos y brindar apoyo a los afectados por el incendio y el tiroteo.