Este joven coyote macho había sido vinculado con la muerte de al menos tres perros pequeños y varios mordiscos a otros perros durante varias semanas en septiembre y octubre. La decisión de eutanizar al animal se tomó tras una extensa investigación por parte del Servicio de Parques Nacionales y biólogos locales de vida silvestre.
El comportamiento del coyote generó una preocupación significativa entre los visitantes del parque y los funcionarios. La ecóloga de vida silvestre Phoebe Parker-Shames informó de casos en los que el coyote cargó contra personas en los senderos del Presidio, indicando que se había vuelto demasiado cómodo alrededor de los humanos. Los esfuerzos para disuadir al coyote, incluidos el uso de pistolas de paintball, no tuvieron éxito, lo que llevó a temores de que la habituación del animal se viera exacerbada por humanos que lo alimentaban y animaban a sus mascotas a interactuar con los coyotes.
Julian Espinoza, portavoz del Área Recreativa Nacional Golden Gate, explicó que la decisión de eliminar al coyote de manera letal estaba alineada con las prácticas de manejo de vida silvestre. A medida que se acumulaban los informes de comportamiento agresivo, las autoridades concluyeron que el animal representaba una seria amenaza para la seguridad pública. Una muestra de ADN tomada del coyote fallecido coincidió con la de los perros que había atacado, lo que consolidó aún más la justificación para su eliminación.
Crissy Field, un popular parque de 100 acres conocido por sus playas y caminos para caminar, es un lugar favorito para los dueños de perros, quienes pueden dejar a sus mascotas correr sin correa en áreas designadas. Sin embargo, Parker-Shames enfatizó que muchos dueños de perros no comprenden completamente el concepto de "control verbal" necesario para mantener a sus perros seguros en tales entornos. La reciente serie de ataques de coyotes ha llevado a los funcionarios del parque a colocar señales instando a los dueños de mascotas a mantener a sus perros con correa.
En los días previos a la muerte del coyote, los biólogos de vida silvestre observaron un comportamiento cada vez más agresivo, incluidos incidentes en los que el coyote cargó contra individuos. Después de que se tomó la decisión final de eliminar al animal, los funcionarios realizaron vigilancia en el parque y finalmente localizaron y mataron al coyote temprano en la mañana del domingo.
Si bien esta eliminación fue considerada necesaria, los biólogos advirtieron que no debe verse como una solución a largo plazo para los problemas relacionados con los coyotes en el área. Smith y Parker-Shames señalaron que a menudo es un solo coyote individual el que causa la mayoría de los conflictos, y el comportamiento de los coyotes puede ser difícil de modificar una vez que han aprendido a asociar a los humanos con la comida.
Martha Walters, presidenta del Grupo de Perros de Crissy Field, destacó la importancia de la conciencia continua, afirmando que los coyotes siguen presentes en la zona y instando a los dueños de perros a mantenerse alerta. Los biólogos reiteraron que mantener a los perros con correa y eliminar los atrayentes de comida del parque son pasos críticos para prevenir futuros conflictos.
Con una estimación de 100 coyotes habitando San Francisco, los funcionarios de vida silvestre continúan abogando por interacciones responsables entre las personas y la vida silvestre. La esperanza es educar al público sobre cómo mantener un entorno seguro tanto para las mascotas como para los coyotes, asegurando que las futuras generaciones de vida silvestre puedan prosperar sin convertirse en un peligro para la comunidad.