Según un informe de la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), la Administración de Seguridad del Transporte (TSA) ya exige que todos los pasajeros presenten una identificación válida para abordar vuelos, pero las medidas actuales podrían no ser suficientes para identificar a inmigrantes de alto riesgo. "La TSA no ha realizado un análisis completo del nivel de riesgo que presentan los inmigrantes sin identificación", señala el informe.
El informe destaca que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) han implementado políticas para examinar a los no ciudadanos, pero se ha identificado una falta de evaluaciones de riesgo integral para estas personas. La CBP y el ICE no han realizado un análisis completo del nivel de riesgo que presentan los inmigrantes sin identificación, lo que podría representar un riesgo para la seguridad nacional.
El DHS responde al informe asegurando que las medidas de control para no ciudadanos han sido actualizadas y reforzadas. Aseguran que cualquier persona sin identificación válida debe someterse a investigaciones y controles adicionales antes de abordar vuelos nacionales. Sin embargo, la Oficina del Inspector General sugirió que aún existen fallas en el proceso, especialmente en relación con los migrantes sin documentos de identificación claros.
El informe también hace referencia a un aumento en la preocupación por los migrantes en listas de vigilancia terrorista. Durante las campañas electorales, el Comité Judicial de la Cámara de Representantes reveló que al menos 250 migrantes, incluidos 99 que fueron liberados en el país, estaban en estas listas, lo que ha generado inquietudes sobre los métodos de verificación de la TSA para prevenir que personas de alto riesgo suban a vuelos nacionales.
A partir de mayo de 2025, la TSA implementará nuevas medidas para la verificación de la identidad de los viajeros, lo que incluirá la obligatoriedad de un "REAL ID" para los ciudadanos estadounidenses, y permitirá que los inmigrantes utilicen pasaportes o tarjetas de residencia (Green Card) como formas de identificación aceptables.