El foco de atención se centra en Luisiana, Estados Unidos, donde se reportó el primer caso grave de influenza aviar H5N1 en el país. Este suceso, confirmado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), marca un hito preocupante, dado que se trata de un caso asociado a una explotación avícola doméstica, y no a una gran granja comercial como la mayoría de los casos previos.
Según el Dr. Demetre Daskalakis, director del Centro Nacional para la Inmunización y Enfermedades Respiratorias del CDC, "se cree que el paciente de Luisiana tuvo contacto con aves enfermas o muertas en su propiedad. No se trata de aves de corral comerciales, y no hubo exposición a vacas lecheras o sus productos relacionados."
El CDC ha mencionado que se están realizando análisis genómicos adicionales de las muestras del paciente en Luisiana, y que la investigación sobre la exposición continúa. Hasta el momento, se han reportado 61 casos humanos de influenza aviar H5 en los Estados Unidos desde abril, la mayoría entre trabajadores de la industria láctea y avícola. Sin embargo, el caso de Luisiana destaca la importancia de tomar precauciones, especialmente para quienes tienen gallinas en sus patios traseros, cazadores y aficionados a las aves.
Este virus, identificado como D1.1, es del mismo tipo que se encontró en casos humanos recientes en Canadá y el estado de Washington, y se ha detectado en aves silvestres y de corral en los Estados Unidos. Es importante destacar que es diferente al B3.13, el tipo detectado en vacas lecheras y en algunos brotes avícolas. El CDC enfatiza que "la mejor manera de prevenir la influenza aviar H5 es evitar la exposición siempre que sea posible", ya que las aves infectadas eliminan virus en su saliva, mucosas y heces.
El CDC aclaró que, a pesar de este caso grave, "este caso no cambia la evaluación general del CDC sobre el riesgo inmediato para la salud pública de la influenza aviar H5N1, que sigue siendo bajo". Sin embargo, la información resalta la necesidad de mantener la vigilancia y seguir las medidas de prevención recomendadas, especialmente si se trabaja o se tiene contacto recreativo con aves o animales potencialmente infectados. La situación sigue bajo investigación.