Pero, en el mundo de la geopolítica y la tecnología militar, la casualidad es un lujo que pocos se pueden permitir. Estas imágenes, publicadas el 26 de diciembre, mostraban dos aeronaves totalmente nuevas, desafiando las expectativas y abriendo un debate a nivel global. El evento coincide, curiosamente, con el 131 aniversario del natalicio de Mao Zedong.
La primera aeronave, captada en vuelo, presenta un diseño novedoso: un ala en forma de diamante, sin estabilizadores verticales, y tres motores. Su control de guiñada parece ser gestionado mediante alerones divididos, similar al B-2 de Northrop Grumman. La entrada de aire es singular: una dorsal, con sistema de entrada supersónica sin desviador, y dos ventrales con tomas en forma de flecha. Un gran fuselaje ventral sugiere la existencia de una bahía de armas interna. El tren de aterrizaje principal, con dos ruedas por lado, es característico de bombarderos pesados como el Sukhoi Su-34. Un Chengdu J-20S, posiblemente en misión de acompañamiento, también aparece en las imágenes.
Según Justin Bronk, investigador principal del Royal United Services Institute, “su tamaño y disposición sugieren que se trata del J/H-XX, el ‘bombardero regional’ tan esperado, diseñado para proporcionar una capacidad de ataque de precisión a gran altitud y baja visibilidad contra bases e incluso barcos en toda la región del Indo-Pacífico”. Sin embargo, Bronk también plantea la posibilidad de que se trate de un prototipo del programa de caza de sexta generación de China.
La segunda aeronave, revelada horas después, exhibe un diseño más tradicional, con una configuración de ala en flecha curvada y posiblemente estabilizadores plegables. Aunque la fecha exacta de las imágenes no está confirmada, una publicación las marca con el 22 de diciembre de 2024. Su aparición ocurre 13 años después del lanzamiento del caza furtivo J-20, y 13 años después del primer vuelo del J-10.
La falta de confirmación oficial por parte del gobierno o la industria china es notable. Sin embargo, la ausencia de censura sobre las imágenes, publicadas por decenas de usuarios en redes sociales, resulta igual de significativa. El misterio persiste. Se sabe que China trabaja en el bombardero sigiloso de largo alcance H-20 y en el bombardero mediano JH-XX, según el informe anual sobre poderío militar chino del Departamento de Defensa de Estados Unidos. También se ha confirmado que se está trabajando en un caza de sexta generación.
El velo de misterio sobre la función específica de cada aeronave permanece. El análisis de estas imágenes y videos continúa, prometiendo nuevos desarrollos en los próximos días y semanas.