En Gator Country, una reserva de vida silvestre ubicada en Beaumont, Texas, el personal registró un fenómeno inusual durante la reciente ola de frío. Las temperaturas mínimas, que descendieron a niveles bajo cero, congelaron los estanques de la reserva. Pero la verdadera sorpresa no fue el hielo, sino la reacción de sus habitantes: los caimanes.
A diferencia de lo que podríamos esperar, los reptiles no quedaron atrapados y congelados. Las imágenes muestran a varios caimanes inmóviles, con solo sus hocicos sobresaliendo del hielo. “Estos animales son tan geniales que asoman la cabeza a través del hielo para poder respirar,” explicó Gary Saurage, copropietario de Gator Country, en un video viral en TikTok.
¿Cómo lograron sobrevivir? La respuesta se encuentra en un proceso llamado brumación. A diferencia de la hibernación de los mamíferos, la brumación es un estado de letargo que reduce drásticamente el metabolismo de los caimanes, permitiéndoles conservar energía y resistir temperaturas extremadamente bajas. Este proceso ocurre naturalmente entre octubre y marzo en Texas.
Pero la brumación por sí sola no explica la imagen de los caimanes con sus hocicos fuera del agua. Saurage destaca la inteligencia instintiva de los reptiles: “Se preparan antes de que el agua se congele, elevando sus hocicos hasta justo por encima de la superficie, como si supieran exactamente lo que va a pasar.” Este comportamiento asegura su acceso al oxígeno durante la brumación, mientras el resto de su cuerpo permanece inmóvil bajo el hielo.
El video de Saurage muestra una serie de detalles fascinantes:
- La precisión con la que los caimanes posicionan sus hocicos.
- La tranquilidad con la que permanecen inmóviles durante horas.
- La resistencia de estos animales a las temperaturas extremas.