Desde la toma de posesión del presidente Donald Trump, se han registrado más de 8,000 arrestos de inmigrantes por parte de agentes federales. Esta cifra, ampliamente difundida por el gobierno, pinta un panorama de una ofensiva migratoria sin precedentes. Sin embargo, una investigación revela un dato que contrasta con la imagen oficial: algunos de los arrestados han sido liberados y devueltos a territorio estadounidense.
Cinco fuentes cercanas a las operaciones del ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas) confirmaron esta información. La razón principal de estas liberaciones radica en las limitaciones físicas y legales que enfrenta la agencia. La capacidad de los centros de detención del ICE es limitada, con aproximadamente 41,500 camas disponibles en todo el país. A esto se suman las órdenes judiciales que prohíben la detención indefinida de inmigrantes.
Esta situación obliga al ICE a recurrir a alternativas. Según las fuentes, los inmigrantes liberados son incorporados a programas de monitoreo conocidos como Alternativas a la Detención. Estos programas, que existen desde hace más de una década, utilizan diferentes métodos de seguimiento, como monitores de tobillo, pulseras o registros telefónicos. El portavoz del ICE reconoció que:
“Los agentes federales encargados de hacer cumplir la ley de la agencia hacen todo lo posible para mantener seguras a nuestras comunidades. En algunos casos, se requiere que ICE libere a ciertos extranjeros arrestados.”La política del ICE prioriza la detención de inmigrantes considerados amenazas a la seguridad pública. Se toma en cuenta si tienen antecedentes penales graves y si provienen de países que se niegan a readmitirlos. Un ejemplo relevante es el caso de Venezuela, donde el acuerdo reciente para la repatriación de ciudadanos ha modificado la situación.
Entre las razones adicionales para la liberación, tres fuentes mencionaron casos médicos o situaciones donde el inmigrante es el único cuidador de menores. Aunque la administración Trump prometió acabar con las políticas de "captura y liberación", las limitaciones de capacidad en los centros de detención del ICE hacen que esta promesa sea difícil de cumplir completamente al interior del país. Es crucial destacar que, según las fuentes, no hay indicios de que se haya liberado a ningún inmigrante con condenas por delitos graves.
El ICE publica diariamente cifras de arrestos en X (antes Twitter), pero no detalla la cantidad de liberados, detenidos o deportados. Esta falta de transparencia alimenta las dudas sobre la efectividad y el impacto real de las políticas migratorias.