Lesión de Derrick Harmon sacude a Steelers en pretemporada de la NFL

No fue un simple raspón ni un moretón: lo que ocurrió en Carolina podría cambiar los planes de Pittsburgh de cara a la campaña que está por comenzar.

Derrick Harmon, la promesa defensiva seleccionada en primera ronda por los Steelers, tuvo que ser retirado del campo en carrito después de una jugada rutinaria que terminó de la peor manera. El novato, quien ya había generado expectativas altas desde su llegada, se torció la rodilla al chocar con un bloqueador de los Panthers. "No volverá al partido", fue el único comunicado oficial del equipo en ese momento, dejando más preguntas que respuestas.

Los detalles de la jugada:

• Ocurrió en el último partido de pretemporada, donde los titulares suelen tener minutos limitados.
• Harmon, sin embargo, fue alineado como parte del plan del coach Mike Tomlin para darle rodaje.
• La rodilla cedió sin contacto directo, solo con el cambio brusco de dirección.

Testigos en el estadio describieron la escena como desgarradora: el jugador, con una toalla cubriéndole el rostro, no pudo contener las lágrimas mientras era transportado. No es para menos. El exjugador de Michigan State y Oregon no solo era visto como pieza clave para reforzar la línea defensiva junto a Cameron Hayward y Keeanu Benton, sino que su selección como 21° overall en el Draft implicaba una apuesta fuerte de la franquicia.

Mientras los médicos evalúan la gravedad de la lesión, los Steelers ya piensan en plan B. Isaiahh Loudermilk, veterano con menos proyección pero más experiencia, sería el principal beneficiado con más minutos de juego. Carolina, por su parte, decidió no arriesgar a sus titulares en un encuentro que, al final, dejó más preocupaciones que respuestas.

Lo que sigue ahora es esperar el diagnóstico oficial. Lesiones de rodilla en pretemporada suelen ser sinónimo de malas noticias, pero en la NFL nada está escrito hasta que los estudios lo confirman. Lo único claro es que Pittsburgh enfrentará su primer obstáculo inesperado antes incluso de que suene el primer silbatazo de la temporada.

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