Muere baleada mujer transgénero tras llamar al 911

El caso se centra en Linda Becerra, una mujer transgénero de origen ecuatoriano, se encontró en una situación desesperada. Desde un hotel en Los Ángeles, realizó una llamada de emergencia al 911, reportando un secuestro.
Según la versión de los hechos proporcionada por la familia y actualmente en litigio, al llegar la policía al hotel, Becerra, quien ya se encontraba visiblemente afectada, explicó a los oficiales haber sufrido una agresión. "Ella les dijo que alguien la había atacado y que tenía intenciones de quitarse la vida", relataron. Fue en ese preciso instante que un agente policial le disparó.
Tras el incidente, Becerra fue trasladada de urgencia a un hospital. Lamentablemente, a pesar de los esfuerzos médicos, permaneció en estado crítico durante 20 días, hasta que finalmente fue desconectada del respirador artificial. Este desenlace fatal ha generado una profunda conmoción y ha provocado que la familia emprenda acciones legales.
La demanda interpuesta contra el departamento de policía de Los Ángeles destaca la falta de protocolos adecuados para el manejo de situaciones con personas en crisis, especialmente considerando la vulnerabilidad adicional de la comunidad transgénero. Se exigen explicaciones detalladas sobre el uso de la fuerza letal y una investigación exhaustiva para evitar sucesos similares en el futuro. La familia Becerra busca justicia y lucha por el reconocimiento de la necesidad de una mejor capacitación policial en la interacción con grupos marginados.
El caso de Linda Becerra no solo plantea interrogantes sobre las prácticas policiales, sino que también subraya la urgencia de abordar la discriminación sistemática que afecta a la comunidad transgénero y la necesidad de crear entornos seguros para todos.