Tragedia aérea en Honduras: 12 muertos tras desplome de avión

El foco de atención se centró en el municipio de Roatán, en Islas de la Bahía, tras el desplome de un avión comercial de la aerolínea LanHSA. Un Jetstream 32, con capacidad para 33 personas, pero que transportaba solo 15 pasajeros y dos tripulantes, se estrelló a aproximadamente un kilómetro de la playa, tras despegar del aeropuerto Juan Manuel Gálvez de Roatán con destino a La Ceiba. Entre los pasajeros viajaban dos menores de edad, un ciudadano hondureño-estadounidense y una mujer de origen francés; el resto eran hondureños.
La rapidez con la que el avión se hundió a unos 50 metros de profundidad dificultó las labores de rescate. Pescadores locales, primeros en responder a la emergencia, rescataron a diez personas, quienes fueron trasladadas a hospitales de la zona. Desafortunadamente, seis de ellas fallecieron. Según reportes oficiales de la Policía Nacional de Honduras, la cifra de víctimas mortales ascendió a doce. Cinco personas sobrevivieron, mientras que al cierre de esta nota, una persona continuaba desaparecida.
Entre los fallecidos se confirmó la identidad del reconocido cantautor garífuna, Aurelio Martínez Suazo, quien poseía doble nacionalidad hondureña y estadounidense. Su pérdida representa un golpe significativo para la cultura hondureña.
“Los hospitales públicos de San Pedro Sula y La Ceiba ya están listos para atender a los pasajeros que viajaban accidentados. Dios proteja las vidas de las personas,” escribió la Presidenta Xiomara Castro en redes sociales, ordenando la inmediata activación del Comité de Operaciones de Emergencia (COE).
La Agencia Hondureña de Aeronáutica Civil (AHAC) activó la Comisión de Búsqueda y Salvamento (SAR) e instruyó a la Comisión Investigadora de Accidentes e Incidentes para determinar las causas del accidente. Se presume una falla mecánica, pero las investigaciones están en curso.
Las labores de búsqueda y rescate, inicialmente dificultadas por la oscuridad y la profundidad del naufragio, continuaron durante la madrugada. La posibilidad de encontrar más sobrevivientes disminuye con el paso del tiempo.