Descubren pirámide de 2200 años en el desierto de Judea

La Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA), junto con el Ministerio de Patrimonio y un ejército de voluntarios, han desenterrado una estructura que ha dejado a los expertos sin aliento: una pirámide de 2.200 años de antigüedad, datada de la época helenística. Los directores de la excavación, Matan Toledano, Eitan Klein y Amir Ganor, describen el hallazgo como excepcional, no solo por su antigüedad, sino también por el excelente estado de conservación de los artefactos encontrados en su interior y alrededores.
Pero la pirámide es solo la punta del iceberg. El sitio arqueológico de Nahal Zohar ha resultado ser una verdadera mina de oro histórica. Entre los hallazgos, destacan:
La función original de la pirámide sigue siendo un misterio. Se barajan varias hipótesis: una torre de vigilancia protegiendo rutas comerciales clave que conectaban el Mar Muerto con el Mediterráneo (transportando productos como sal y betún); una tumba monumental de algún personaje importante; o incluso un edificio ceremonial. La investigación continúa, prometiendo desvelar más secretos de este fascinante periodo histórico.
Este proyecto, iniciado hace ocho años por el gobierno israelí para proteger el patrimonio del desierto de Judea de excavaciones ilegales y saqueos, ha permitido el estudio sistemático de más de 180 kilómetros de acantilados, identificando cerca de 900 cuevas. El uso de drones y tecnología avanzada ha sido fundamental para el éxito de esta ambiciosa iniciativa, consolidando al desierto de Judea como un enclave clave para la arqueología del Medio Oriente.
El director de la Autoridad de Antigüedades de Israel, Eli Escusido, ha resaltado la importancia de este proyecto, no solo por los descubrimientos en sí, sino por la colaboración ciudadana y el avance tecnológico empleado.