Proponen impuestos a remesas; advierten posible impacto en migración

En el centro de la controversia se encuentra la propuesta de ley "One Big Beautiful Bill Act", aprobada por la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Esta ley incluye un controvertido impuesto del 3.5% a las remesas internacionales enviadas por personas que no son ciudadanos estadounidenses. Esta medida ha generado una ola de reacciones, especialmente en México.
La mandataria mexicana, Claudia Sheinbaum, ha expresado su profunda preocupación. En una conferencia de prensa transmitida a través de redes sociales, Sheinbaum denunció que "el impuesto afecta a los que menos tienen en México, quienes son los receptores de las remesas". La embajadora mexicana en Estados Unidos ha estado en contacto con diversas organizaciones, incluyendo grupos de mexicanos-americanos, quienes se oponen a la medida y realizan gestiones para su anulación.
Las remesas representan una parte fundamental de la economía mexicana. El año pasado, los mexicanos residentes en el extranjero enviaron un récord de $64.7 mil millones de dólares a su país de origen. Este flujo de dinero sustenta a millones de familias, evitando desplazamientos forzados a través de la posibilidad de generar ingresos en sus comunidades.
Sheinbaum argumenta que los mexicanos en Estados Unidos, independientemente de su estatus migratorio, ya pagan impuestos. Además, recuerda un acuerdo binacional de 1992 que exime de impuestos a los ciudadanos estadounidenses sobre ingresos mexicanos, un privilegio que, según se indica, se extiende a los ciudadanos mexicanos. La mandataria menciona la posibilidad de realizar "movilizaciones pacíficas" para llamar la atención internacional sobre este asunto crucial.
El Comité Conjunto sobre Tributación estima que este impuesto podría recaudar más de $22 mil millones de dólares en la próxima década. Sin embargo, existen voces que advierten sobre las posibles consecuencias. Mark Krikorian, director ejecutivo del Centro de Estudios de Inmigración, afirma que gravar las remesas dificultaría que los inmigrantes permanezcan ilegalmente en Estados Unidos: "Una de las principales razones por las que la gente viene aquí es para trabajar y enviar dinero a casa. Si eso se dificulta mucho, se vuelve menos atractivo venir aquí".
Por otro lado, el Instituto Cato, enfocado en la investigación de políticas públicas, ha expresado inquietudes sobre la privacidad y la manera en que se aplicaría este impuesto. El analista de políticas Nicholas Anthony señala que el mecanismo propuesto crearía "un sistema de dos niveles donde cualquiera que quiera evitar el impuesto debe entregar información personal y utilizar canales aprobados por el estado", lo que no solo recaudaría ingresos, sino que también almacenaría datos sensibles de los remitentes. El debate, sin duda, continuará, con implicaciones de largo alcance para la economía y la migración entre México y Estados Unidos.