Contrabandistas usan coles para ocultar $2.8M en metanfetamina

El protagonista de esta historia es José Angel Ibarra-Rojas, un ciudadano mexicano de 36 años. Ibarra-Rojas no eligió un método convencional para transportar su mercancía ilícita. Su arresto, ocurrido el 18 de junio de 2024 en Pharr, Texas, durante un control de rutina a un tráiler, reveló un ingenioso, aunque poco ortodoxo, sistema de contrabando.
Dentro del cargamento de coles, aparentemente inofensivo, se escondían 1,154 paquetes de metanfetamina. Pero no se trataba de un simple ocultamiento: la droga estaba envuelta en plástico y cuidadosamente insertada dentro de "bolas" ubicadas en el interior de las mismas coles, tras haber sido previamente vaciadas y cubiertas con hojas externas para disimular la manipulación. El valor estimado en la calle de esta mercancía ilícita supera los $2.8 millones de dólares.
Según documentos de la corte, Ibarra-Rojas confesó su participación en el tráfico, declarando que sabía que el remolque contenía narcóticos y que acababa de cruzar la frontera desde México. Admitió recibir $1,000 dólares por organizar el transporte de la droga hacia el interior de Estados Unidos, incluso revelando su participación en transportes anteriores. La investigación, realizada conjuntamente por el ICE (Inmigración y Control de Aduanas), la CBP (Aduanas y Protección Fronteriza) y las autoridades locales, resultó en la condena de Ibarra-Rojas a 11 años de prisión federal. Su sentencia, emitida el 4 de junio de este año por el Juez de Distrito de Estados Unidos Drew Tipton en McAllen, Texas, incluye su posterior deportación a México tras cumplir su condena.
El agente especial adjunto a cargo del ICE HSI Rio Grande Valley, Mark Lippa, declaró: “Esta sentencia envía un mensaje contundente: cualquier criminal que colabore con organizaciones terroristas para contrabandear drogas peligrosas a nuestras comunidades enfrentará graves consecuencias”. El caso ha generado un debate sobre las estrategias cada vez más sofisticadas utilizadas por los cárteles para introducir drogas en Estados Unidos.
El uso de coles para ocultar la metanfetamina, en un operativo que involucró la manipulación de cada cabeza de col, resalta la compleja logística y la inversión de recursos en el tráfico de estupefacientes a través de la frontera entre México y Estados Unidos.