Estados Unidos anuncia éxito total de la 'Operación Martillo de Medianoche' contra Irán
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Nicol Matuz ScottEn una conferencia de prensa realizada en el Pentágono, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, y el jefe del Estado Mayor Conjunto, el general Dan Caine, ofrecieron declaraciones contundentes sobre la operación, bautizada como "Operación Martillo de Medianoche". Hegseth, en su primera aparición en el Pentágono desde que asumió el cargo, usó un traje azul con un pañuelo con el motivo de la bandera estadounidense, un detalle que no pasó desapercibido en las redes sociales.
Hegseth atribuyó el éxito de la operación a la "visión audaz" del presidente Trump, asegurando que las instalaciones nucleares iraníes en Natanz, Fordow y Esfahan fueron "obliteradas", eliminando así la capacidad de Irán para adquirir armas nucleares. “Fue un éxito increíble y abrumador. La orden que recibimos de nuestro comandante en jefe fue precisa,” declaró Hegseth.
El general Caine, presente en la Sala de Situación durante la operación según imágenes de la Casa Blanca, detalló el despliegue militar: una combinación de bombarderos B-2 y aviones de combate de cuarta y quinta generación, lanzados desde Estados Unidos. Se menciona una estratagema con una fuerza de distracción sobrevolando el Océano Pacífico mientras siete bombarderos B-2, en un vuelo ininterrumpido de 18 horas, lanzaban 14 bombas GBU-57, conocidas como "rompebúnkeres", sobre las instalaciones nucleares iraníes. Un submarino de la armada estadounidense lanzó misiles Tomahawk sobre el sitio de Esfahan.
Caine afirmó que, según la información disponible, "no se registraron disparos contra la fuerza atacante, ni los cazas iraníes despegaban, ni sus sistemas de misiles tierra-aire parecieron detectar nuestra presencia. Mantenemos el elemento sorpresa". Sin embargo, la evaluación de los daños, especialmente en Fordow -la instalación considerada la más difícil de alcanzar-, permanece incompleta. No se ofrecieron detalles más allá de la afirmación de "obliteración".
La Casa Blanca ha confirmado que los líderes del Congreso fueron notificados después del ataque, una decisión que se espera genere controversia. Hegseth, por su parte, aseguró que la administración está en contacto con el liderazgo iraní, a través de canales públicos y privados, con el objetivo de promover negociaciones de paz. "Creemos que esto tendrá un claro impacto psicológico en su visión del futuro," añadió Hegseth, refiriéndose a la audacia del ataque.
Mientras tanto, la comunidad internacional observa con preocupación el desarrollo de los acontecimientos, pendientes de mayores detalles y evaluaciones de las consecuencias a largo plazo de esta operación militar.
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