El mundo responde a ataques de Estados Unidos en Irán con llamados a la diplomacia

El foco de atención era Irán, tras un sorpresivo ataque por parte de Estados Unidos, decisión que el presidente Donald Trump había anunciado apenas días antes. Este ataque, realizado el domingo en la mañana, a instalaciones nucleares iraníes, formaba parte de la respuesta de Estados Unidos al conflicto entre Israel e Irán.
La repercusión inmediata fue inmediata. La incertidumbre sobre el alcance del daño se extendía por todos los rincones del planeta, lo que generó una ola de reacciones a nivel internacional. Irán prometió represalias, aumentando la preocupación por una escalada del conflicto.
Entre las reacciones, destaca la del Primer Ministro libanés, Nawaf Salam, quien, a través de una publicación en X (antes Twitter), recalcó la necesidad de que Líbano se mantenga al margen de cualquier repercusión del conflicto: “Es cada vez más importante para nosotros adherirnos estrictamente al interés nacional supremo, que es la necesidad de evitar que Líbano sea... arrastrado a la confrontación regional en curso de cualquier manera”.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), por medio de su Secretario General, António Guterres, expresó su profunda preocupación a través de un comunicado en X, donde instó a la contención y a la diplomacia como la única solución viable. “Existe un riesgo creciente de que este conflicto pueda salirse rápidamente de control, con consecuencias catastróficas... Hago un llamado a los Estados miembros para que distiendan. No hay solución militar. El único camino a seguir es la diplomacia.”
La respuesta de otros países fue variada. China, a través de medios estatales, cuestionó la decisión de Estados Unidos, planteando la posibilidad de una repetición de errores pasados en la región. Colombia, por medio de su Presidente Gustavo Petro, realizó un llamado público a la paz. Venezuela condenó el ataque, calificándolo como un acto de agresión ilegal.
Asimismo, países como Nueva Zelanda, Japón, Corea del Sur y Australia mostraron su preocupación y solicitaron un diálogo para resolver la situación. Cada uno, desde su perspectiva, expresó su inquietud y la necesidad de un final pacífico a la crisis.
La situación, a pesar de las declaraciones internacionales, continuaba tensa. El impacto a largo plazo de las acciones de Estados Unidos, así como la respuesta de Irán, aún permanecen inciertos, dejando un panorama geopolítico inestable y en constante evolución.