Campo magnético de resonador mata a hombre que ingresó con cadena metálica

Según reportes oficiales del Departamento de Policía del Condado de Nassau, el incidente ocurrió cuando Keith McAllister, de 61 años, ingresó sin autorización al área de resonancia magnética donde su esposa acababa de ser atendida. Lo que él ignoraba -y que todo paciente conoce por los múltiples letreros de advertencia- es que portaba consigo un elemento letal: "Una cadena metálica común se transformó en un proyectil bajo esas condiciones", explicó el vocero policial.

Los hechos se desarrollaron así:

• La máquina permanecía activa con su campo magnético operando a plena capacidad
• McAllister entró para ayudar a su esposa a levantarse de la camilla
• La fuerza magnética (aproximadamente 30,000 veces más potente que el campo gravitacional terrestre) atrajo instantáneamente la cadena
• El impacto contra el equipo generó traumatismos severos

Adrienne Jones-McAllister, testigo directo de la escena, describió a News 12 Long Island los momentos de angustia: "Intentamos liberarlo pero era como luchar contra un imán gigante. Su cuerpo quedó aprisionado contra la máquina". Los técnicos del centro médico Nassau Open MRI activaron el protocolo de emergencia, pero el daño ya estaba hecho.

Las máquinas de resonancia magnética no son simples equipos médicos. Operan con principios físicos extremos:

• Generan campos magnéticos entre 1.5 y 3 Teslas (unidades de densidad de flujo magnético)
• Requieren sistemas de enfriamiento criogénico con helio líquido
• Pueden acelerar objetos metálicos a velocidades peligrosas

Este lamentable incidente ha reabierto el debate sobre los protocolos de seguridad en áreas de diagnóstico por imágenes. Múltiples instituciones médicas en México ya han emitido alertas internas para reforzar las medidas preventivas, especialmente en lo que respecta al control de acceso a las salas de resonancia.

La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) mantiene registros de al menos 12 accidentes graves relacionados con objetos metálicos en resonadores magnéticos durante la última década, aunque pocos con consecuencias fatales como este caso.

Mientras las investigaciones continúan, especialistas en seguridad hospitalaria subrayan un hecho indiscutible: los letreros de advertencia existen por una razón. Cada año, estas máquinas salvan millones de vidas mediante diagnósticos precisos, pero su poder requiere un respeto absoluto a los protocolos establecidos.

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