Redadas del ICE generan ausentismo escolar récord en comunidades migrantes

"Las aulas están más vacías que en cualquier septiembre anterior", admite una maestra de primer grado en Phoenix que pidió omitir su nombre. Los números lo respaldan: solo en Miami-Dade, 13 mil pupitres quedaron sin ocupante este año. La razón, según organizaciones comunitarias, es el incremento de redadas del ICE en zonas aledañas a escuelas públicas.
Detrás de las estadísticas hay patrones preocupantes:
Lo paradójico: mientras las autoridades federales insisten en que "las escuelas permanecen como espacios protegidos", cámaras de vigilancia en Albuquerque captaron a agentes interrogando a adolescentes en paradas de autobús a 200 metros de un liceo. El vacío legal está en la definición de "espacio público", que incluye aceras y áreas de espera.
En respuesta, coaliciones de maestros en Los Ángeles y Chicago organizan "cadenas humanas" cada mañana. Portando chalecos reflectantes, forman corredores seguros desde las estaciones de tren hasta los portones escolares. "No es protesta, es protección", aclara la presidenta del sindicato de educadores de Nevada. Mientras tanto, en Washington D.C., el sonido de botas militares mezclado con campanas escolares dibuja un paisaje que muchos estudiantes no olvidarán.