El Diario de SonoraCDMX
Especialistas consideraron el brote una situación menor aunque señalaron que la contingencia evidencia la falta de información
El especialista del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Gabriel Martínez, descartó que el brote de coronavirus tenga un impacto significativo en la economía mexicana, aunque opinó que la contingencia evidencia la falta de sistemas de información para dar seguimiento a los casos.
“No hay ningún riesgo para la economía mexicana, es una cosa menor”, respondió el experto en Políticas Públicas, luego de que la Secretaría de Salud de México reportará sospechosos casos en Tamaulipas, Jalisco y Ciudad de México.
Esto después de que el coronavirus fuera detectado en la ciudad de Wuhan, China, y hasta el momento se han diagnosticados 881 casos de contagio y reportado 26 muertes. La situación de emergencia obligó a poner en cuarentena a esa metrópoli de 11 millones de habitantes, y otra ciudad cercana a ella.
El también economista refirió que cada año se tienen casos de enfermedades contagiosas. “No es algo inesperado y no veo que tenga ser una situación especial”, opinó.
No obstante, consideró que es necesario tomar medidas de prevención ante las posibles afectaciones que pudieran surgir en los sectores de comercio, servicios y turismo para evitar afectaciones.
Se estima que en 2009, cuando ocurrió la pandemia de influenza H1N1, la industria hotelera registró una ocupación de sólo 10 por ciento y fueron cerrados seis mil 500 restaurantes en todo el país.
El turismo fue el cuarto generador de divisas en 2008, con más de 13 mil millones de dólares, y debido a la contingencia sanitaria tuvo pérdidas significativas un año después.
En noviembre de aquel año, por ejemplo, el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobaron préstamos por 491 millones de dólares y tres mil millones de dólares para la prevención y control de la influenza en México.
Sin embargo, el especialista opinó que después de la epidemia se desconocía cuánta gente resultó enferma por influenza H1N1 y, por tanto, mostró la debilidad de los sistemas de información de los hospitales para tener el control de los casos.
Los casos de esa enfermedad continúan en la actualidad, pero es necesario reforzar las acciones para hacer frente a esas situaciones que demandan atención y mayores recursos económicos.
Ejemplificó que el gobierno mexicano carece de capacidad para comprar medicamentos, como ocurre con los tratamientos oncológicos, e incluso los hospitales padecen una crisis ante los ajustes del presupuesto para el sector salud. “A lo mejor algunos hospitales no están adecuados para minimizar el riesgo del contagio”, añadió.
“Si aparecen casos de esas enfermedades, debería tenerse información muy rápida para medir el impacto y contener el brote. Pero no tenemos estos sistemas de información en México”, concluyó
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