Varias personas enfrentan acusaciones en relación con el macabro hallazgo de cuatro cuerpos en un rancho en el norte de México, donde se habían reportado como desaparecidos dos australianos y un estadounidense. Los hermanos australianos Callum y Jake Robinson, junto con el estadounidense Jack Carter Rhoad, fueron vistos por última vez el 27 de abril en Baja California.
Aunque tres de los cuerpos aún no han sido identificados oficialmente por las autoridades, informes de sugieren que corresponden a los extranjeros desaparecidos. La fiscal general del estado, María Elena Andrade Ramírez, ha anunciado una investigación por asesinato, señalando que se cree que el trío fue víctima de un intento de robo que terminó en tragedia.
Según Ramírez, los perpetradores estaban armados y dispararon contra las víctimas cuando estas se resistieron al robo. El lugar donde se vio por última vez a los tres hombres, fue en La Bocana en Santo Tomás, mismo que estaba marcado por casquillos de bala, según reportes locales. Tres personas, dos hermanos y una mujer de 23 años, fueron arrestadas y enfrentan cargos equivalentes a secuestro.
Los cuerpos fueron encontrados en un pozo profundo cerca de un acantilado en Punta San José en Santo Tomás, en el municipio de Ensenada. El rescate de los cuerpos tomó unas 20 horas. Además de los extranjeros desaparecidos, el cuarto cuerpo corresponde al dueño del rancho, quien llevaba semanas desaparecido. La causa de su muerte aún no se ha determinado.
Antes del descubrimiento de los cuerpos, la policía local ya sospechaba de un crimen, dado que se encontró el vehículo de los desaparecidos quemado y un campamento abandonado con rastros de sangre. Los medios locales también informaron sobre el hallazgo de un diente. Los padres de Callum y Jake Robinson voalron a México en busca de sus hijos desaparecidos, según informes.
Los investigadores continúan trabajando en el área donde se encontraron los cuerpos, y aunque tres personas están bajo arresto, no se descartan otras líneas de investigación.