Es indignante saber que un trabajador, Juan Carlos Hernández, de tan solo 27 años, perdió la vida tras haber sido intoxicado en la planta. La noticia se filtró como un susurro, casi como un secreto a voces, pero la verdad es que la situación es mucho más grave de lo que se ha dicho.
Se habla de que cerca de 50 trabajadores se intoxicaron tras haber consumido carne de puerco en mal estado. La noticia llegó a la policía municipal, pero en lugar de actuar con rapidez y enviar ambulancias para atender a los trabajadores enfermos, los directivos de Yazaki minimizaron la situación, negándose a solicitar la ayuda médica que urgía. ¿Acaso les importaba más el tiempo perdido en producción que la salud de sus empleados?
Es una verdadera vergüenza que los directivos de Yazaki solo enviaran a los trabajadores a enfermería por unas simples pastillas. ¿Acaso no comprenden la gravedad de una intoxicación alimentaria? ¿No les importa la vida de sus empleados?
Los trabajadores, hartos de la desidia y el desprecio de sus superiores, han anunciado una manifestación y un paro laboral para el próximo lunes. ¡Es hora de que se haga justicia! ¡Es hora de que Yazaki se responsabilice por la muerte de Juan Carlos y por la salud de sus trabajadores!
No podemos permitir que la vida de los trabajadores se vea amenazada por la avaricia de los empresarios. ¡Es tiempo de que la voz de los trabajadores se escuche y que se tomen medidas para evitar que tragedias como esta se repitan!