El 28 de agosto, México se viste de nostalgia y amor al celebrar el Día del Abuelo, una fecha que recuerda la importancia de los pilares de la familia, esos seres que nos llenan de sabiduría, historias y abrazos cálidos. A diferencia del Día Internacional del Abuelo, que se celebra el 26 de julio, México ha elegido su propio día para honrar a los abuelitos, reconociendo su invaluable papel en la vida de cada familia.
¿De dónde surgió esta celebración? La historia nos lleva a 1998, cuando se instauró el Día Nacional del Adulto Mayor, un reconocimiento a la invaluable experiencia de quienes han recorrido un largo camino. Con el tiempo, la denominación evolucionó hacia el Día Nacional de las Personas Mayores, buscando un lenguaje más inclusivo que reflejara la diversidad dentro de este grupo. El Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam) ha sido fundamental en este proceso de cambio, impulsando una visión más amplia y humana de la vejez.
El 28 de agosto también se integra al mes mundial de la vejez, una iniciativa impulsada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Aunque la ONU conmemora el Día Internacional de las Personas de Edad el 1 de octubre, México ha decidido dedicar un día especial a los abuelos, aquellos que han tejido la historia familiar con sus manos y sus historias.
En este día tan significativo, las palabras de cariño y gratitud son el mejor regalo para nuestros abuelitos. Frases como: "Tu amor ha sido una luz en mi vida desde que nací. ¡Feliz Día del Abuelo!", son un reflejo del profundo agradecimiento que sentimos por su presencia en nuestras vidas.