Enfrentamientos entre civiles armados y las autoridades, así como ataques y quema de vehículos, marcaron la jornada en diferentes puntos del estado.
El detonante de la violencia parece ser un operativo implementado por las fuerzas federales con el objetivo de desmantelar una célula criminal dedicada al robo de vehículos. Este operativo, que se llevó a cabo en la autopista de Occidente, desencadenó un conflicto armado en Erongaricuaro, donde sujetos armados atacaron a agentes de la Fiscalía General de la República, el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional.
Las redes sociales se inundaron de videos compartidos por los habitantes de Erongarícuaro, mostrando a hombres armados en la plaza principal del municipio y los sonidos de disparos de armas de alto calibre.
Tras los enfrentamientos, se registraron incidentes como el secuestro y la quema de vehículos en la carretera Morelia-Quiroga y en la autopista de Occidente, cerca de Churintzio. Además, se reportaron bloqueos en varias carreteras de la región, como Chilchota.
Las autoridades confirmaron la quema de tres vehículos en Quiroga y dos camiones en la autopista de Occidente. En respuesta a esta situación, se ha desplegado un fuerte contingente de fuerzas policiales y militares en la región para intentar restaurar el orden.
La violencia en Michoacán, que se ha intensificado en los últimos años, genera una profunda preocupación por la seguridad de la población y la estabilidad de la región.