En el municipio de Allende, Nuevo León, la llegada del alcalde panista Eduardo "Lalo" Leal Buenfil a la alcaldía ha traído consigo algunos cambios, especialmente en la nómina municipal. Mientras que algunos empleados del ayuntamiento recibieron aumentos salariales considerables, otros vieron sus salarios congelados. La situación ha generado controversias y críticas en la comunidad.
Según información de la página de transparencia del municipio, la directora del DIF fue una de las más beneficiadas con el cambio de administración. La nueva directora, Anaí Garza González, recibe $33,598 pesos mensuales, lo que representa un aumento del 63% en comparación con el salario de su predecesora, Victoria García Cavazos, quien percibía $20,578 pesos.
Otros funcionarios cercanos al alcalde también recibieron aumentos importantes. El Secretario del Ayuntamiento pasó de ganar $27,562 pesos a $33,598 pesos, un aumento del 22%. De igual manera, el director de deportes vio un incremento del 22% en su salario, pasando de $21,314 pesos a $25,889 pesos.
Sin embargo, no todos los empleados del ayuntamiento recibieron un trato similar. El salario de los intendentes se mantuvo sin cambios, como el de una intendente que recibió $7,938 pesos mensuales tanto en septiembre como en octubre.
Los regidores también experimentaron un incremento salarial, aunque menor que el de los funcionarios cercanos al alcalde. Su salario pasó de $16,291 pesos a $18,259 pesos, un aumento del 12%.
El propio alcalde Lalo Leal también recibió un aumento salarial, pero solo del 3.4%, pasando de $40,728 pesos a $42,132 pesos mensuales.
Estos cambios en la nómina del municipio de Allende han generado debates y cuestionamientos sobre la transparencia y la equidad en la gestión del alcalde Eduardo "Lalo" Leal Buenfil.