Un grupo de personas que esperaban el transporte público en un paradero fueron arrolladas por un vehículo que se salió de control. Según los primeros reportes, el conductor del vehículo manejaba a exceso de velocidad y bajo los influjos del alcohol. Al perder el control de la unidad, se subió a la banqueta y embistió a las personas que esperaban en el paradero. El impacto fue tan fuerte que el vehículo quedó destruido de la parte frontal.
El saldo de la tragedia es de cuatro personas muertas y cinco lesionados. Los equipos de emergencia se movilizaron rápidamente para atender a los heridos, mientras que otros fueron enviados a centros hospitalarios. El conductor que provocó el accidente fue detenido y subido a una patrulla.
La Policía de Tránsito capitalina llegó al sitio para llevarse al auto y uniformados cerraron la zona para realizar las labores de emergencia y las correspondientes para el levantamiento de los cadáveres. "El conductor perdió el control del vehículo y se subió a la banqueta, embistiendo a las personas que estaban en el paradero", según los primeros reportes.
La investigación sobre el accidente sigue en curso, pero los primeros indicios apuntan a que el mal manejo del vehículo por parte del conductor fue la causa principal del trágico suceso.