En medio del debate público, la figura de la Presidenta Claudia Sheinbaum ha tomado el centro de la escena. El pasado 16 de diciembre, durante su conferencia matutina, Sheinbaum salió a defender la reforma, asegurando que los ahorros de los trabajadores del Infonavit están, "totalmente protegidos" y que la Secretaría de Hacienda mantendrá una estrecha vigilancia.
Pero la tranquilidad que intenta transmitir la mandataria no calma las aguas. La reforma, según sus críticos, no se limita a una simple actualización. Se plantea una reestructuración profunda, equiparando la estructura del Infonavit a la del IMSS, un cambio que, para algunos, abre la puerta a un control más centralizado y potencialmente menos transparente.
Un punto particularmente controversial es la creación de una empresa constructora por parte del Infonavit. Mientras la administración argumenta que esto fortalecerá la institución y combatirá la corrupción, se levantan voces que cuestionan la necesidad de esta nueva entidad, especialmente considerando la declaración de que el Infonavit carece de la capacidad de construir un millón de viviendas por sí solo. ¿Será esta empresa la solución o un nuevo foco de posibles problemas?
La falta de detalles concretos sobre la garantía de Hacienda a los ahorros también genera preocupación. Si bien Sheinbaum descartó cualquier riesgo, la ausencia de una explicación clara y accesible sobre el funcionamiento de esta garantía en la nueva estructura del Infonavit deja un vacío informativo que no se llena con la promesa de más detalles por parte de Octavio Romero para el 18 de diciembre.
Otro aspecto que alimenta la incertidumbre es el aumento del poder del Infonavit en la industria de la construcción. Existe la preocupación de que este mayor control pueda generar especulación en los precios de materiales como cemento y varilla. La propuesta de compras consolidadas como solución, aunque bienintencionada, no logra disipar completamente las dudas.
En resumen, el panorama es complejo. Si bien la intención de fortalecer al Infonavit es laudable, la falta de transparencia y la ambigüedad en la implementación de la reforma han generado un debate intenso. La clave para resolver esta situación radica en una comunicación más clara, concisa y, sobre todo, más transparente por parte de las autoridades.