Sobre la calle Arteaga, en la esquina con Emilio Carranza, un edificio abandonado se convirtió en el escenario de un incidente que movilizó a las autoridades. El fuego, que comenzó como una pequeña fogata, se propagó rápidamente, consumiendo buena parte de la estructura.
Según informes de la Policía de Monterrey, el incidente se originó cuando un grupo de personas en situación de calle intentó mitigar el frío con una fogata improvisada dentro del inmueble. Desafortunadamente, "el fuego alcanzó material inflamable que estaba acumulado en el lugar", afirmaron fuentes policiales.
La rápida expansión del fuego alertó a los elementos policiacos que patrullaban la zona. La densa columna de humo negro fue imposible de ignorar. De inmediato, solicitaron apoyo a Bomberos Nuevo León.
La labor de los bomberos fue ardua. El edificio, ya deteriorado, contenía una gran cantidad de basura y, según testigos, "una acumulación impresionante de botellas de plástico", lo que dificultó la extinción del incendio. El trabajo para sofocar completamente las llamas y los rescoldos se extendió por más de una hora.
Mientras tanto, elementos de Movilidad cerraron temporalmente la calle Arteaga para garantizar la seguridad y facilitar las maniobras de los bomberos. Afortunadamente, no se reportaron heridos ni intoxicaciones.
El incidente resalta la vulnerabilidad de las personas en situación de calle durante las bajas temperaturas y la necesidad de implementar estrategias de apoyo y prevención para evitar tragedias similares.