Encuentran restos óseos en el Ajusco: esperanza en casos de desaparecidos en CDMX

El hallazgo, ocurrido el 28 de abril durante la Quinta Brigada Regional de Búsqueda de Personas desaparecidas, estuvo a cargo del colectivo “Una Luz en el Camino”. Este grupo, conformado principalmente por familiares de desaparecidos, ha estado trabajando incansablemente en la zona. Fueron tres fragmentos óseos los encontrados, inmediatamente asegurados por la Fiscalía de la CDMX para su posterior análisis.
Según informes, la Fiscalía capitalina ya trabaja en la identificación de los restos. Se espera que los resultados de las pruebas periciales, incluyendo análisis de ADN, aporten información crucial para resolver algunos casos pendientes de personas desaparecidas en la región. El proceso, según fuentes de la Fiscalía, podría tardar varias semanas, debido a la complejidad del análisis forense.
Cabe destacar que esta no es la primera ocasión en que se localizan restos humanos en el Ajusco. De hecho, "estamos hablando de una problemática sistemática que exige más recursos y estrategias de búsqueda efectivas", comentó una fuente anónima involucrada en la brigada. El caso de Jaqueline Palmeros, que encontró restos óseos en noviembre de 2024, y cuya hija, Jael Monserrat Uribe Palmeros, desaparecida desde julio de 2020, fue identificada gracias a los análisis posteriores, ilumina la importancia de estas iniciativas.
La nueva Estrategia para la Búsqueda y Localización de Personas 2025-2030, anunciada por la Jefa de Gobierno, Clara Brugada, busca fortalecer las capacidades institucionales para abordar la crisis humanitaria de las desapariciones en la ciudad. La estrategia se centra en tres ejes: fortalecimiento del sistema de búsqueda, atención a las familias y prevención de desapariciones. Esto incluye una mayor inversión en tecnología, capacitación y coordinación entre las diferentes dependencias.
La participación de alrededor de 50 personas, incluyendo madres buscadoras y voluntarios de diferentes colectivos, en esta Quinta Brigada, resalta la colaboración civil en la búsqueda de justicia y cierre para las familias afectadas. Los meses de gestión previos al operativo subrayan los desafíos y la necesidad de una mayor coordinación entre instituciones y la sociedad civil.
El hallazgo en el Ajusco, si bien no ofrece respuestas inmediatas, representa un paso significativo en la búsqueda continua de justicia y el esclarecimiento de los casos de personas desaparecidas en la Ciudad de México. La complejidad del proceso, sin embargo, requiere paciencia y colaboración continua.