Sinaloa: crisis humanitaria por violencia; 39 niños asesinados

El conflicto, que se intensificó tras la captura de Ismael "El Mayo" Zambada en julio de 2024, ha generado una crisis humanitaria sin precedentes. La disputa entre las facciones lideradas por los herederos de "El Chapo" Guzmán y la de Zambada ha dejado un saldo aterrador: más de 1200 muertos y 1400 desaparecidos, según datos no oficiales. Pero hay una cifra que impacta aún más profundamente: al menos 39 menores de edad asesinados y 97 desaparecidos en tan solo ocho meses.
Óscar Loza, presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Sinaloa, describió la situación con un desgarrador lamento: "39 personitas menores de edad han perdido la vida en este conflicto armado". La pérdida de inocencia es inmensa; la violencia ha arrebatado el futuro de decenas de niños, dejando una cicatriz imborrable en la sociedad sinaloense.
Un incidente reciente, ocurrido el pasado lunes en Badiraguato, cuna del narcotráfico en México, ilustra la crueldad de este conflicto. Dos niñas, de 7 y 12 años, perdieron la vida en un enfrentamiento entre fuerzas de seguridad y un grupo armado. Un niño de 12 años resultó herido, junto con sus padres y otros familiares. El municipio, históricamente asociado con la presencia de importantes figuras del narcotráfico, se ha convertido en un escenario de horror para sus habitantes.
La violencia no se limita a los enfrentamientos armados. Los desaparecidos, en su mayoría niños, representan una herida abierta en la sociedad. Sus familias viven en una agonía constante, sin saber el paradero de sus seres queridos. La búsqueda de respuestas y justicia se convierte en una lucha interminable contra la impunidad.
El impacto trasciende el ámbito estrictamente criminal. La economía de Sinaloa se encuentra gravemente afectada, la vida social se ve paralizada por el miedo, y el tejido social se desgarra con cada nueva tragedia.