Sheinbaum analiza daños y acción legal por basura espacial de SpaceX en Tamaulipas

El gobierno de México, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, realiza una revisión exhaustiva sobre los impactos ambientales y de seguridad ocasionados por los restos del cohete Starship de SpaceX que cayeron en las costas de Tamaulipas tras un fallo en su lanzamiento desde Texas. Sheinbaum confirmó que se analiza qué leyes internacionales podrían haber sido violadas con este incidente para iniciar, en su caso, un proceso legal contra la empresa responsable.
El accidente, ocurrido durante el noveno lanzamiento experimental de Starship en Boca Chica, Texas, provocó la desintegración del propulsor al regresar a la atmósfera, dispersando fragmentos en el Golfo de México. Algunos de estos residuos, compuestos por materiales como aluminio, caucho y plástico, llegaron hasta la playa Bagdad en Matamoros, generando preocupación tanto en autoridades locales como en grupos ambientalistas por la contaminación y los riesgos asociados a la micro basura espacial esparcida a lo largo de más de 40 kilómetros de costa.
El impacto ambiental es particularmente grave debido a la presencia de la tortuga Lora, especie en peligro de extinción que habita esta región y que podría confundir los fragmentos de basura con alimento, poniendo en riesgo la supervivencia de sus crías. La liberación prevista de diez mil crías se ve amenazada por esta contaminación, lo que añade presión a las autoridades para tomar medidas contundentes ante esta situación transfronteriza.
SpaceX, liderada por Elon Musk, mantiene su ambicioso objetivo de llevar humanos a Marte, pero el accidente en Tamaulipas pone de manifiesto las repercusiones ambientales que pueden derivarse de sus experimentos espaciales. En respuesta, el gobierno mexicano estudia las vías legales internacionales para demandar y mitigar los daños causados por estos desechos en territorio nacional.