El Diario de SonoraNogales
La situación suscitada entre bomberos y el municipio de Hermosillo refleja la gran necesidad de que los gobiernos estatales y congresos tomen en serio a los “apagafuegos” para destinarles recursos y no solo se acuerden de ellos cuando hay incendios o tragedias.
El presidente de la Asociación Estatal de Jefes y Bomberos de Sonora, José Manuel Hernández Domínguez, reconoció que no han recibido ningún tipo de solicitud de apoyo, oral o escrita, de parte del jefe de bomberos de Hermosillo, comandante Rodolfo Barroso ni de los manifestantes.
“Soy bomberos, tengo 28 años de oficio en Nogales, se dé lo que se trata y de lo que están hablando, lo que solicitan y me sumo a ello como bombero, porque a mi punto de vista todos deberían de tener un buen sueldo, los que son remunerados, porque en Sonora existen bomberos voluntarios, municipales y paramunicipales”, manifestó.
Aseguró estar de acuerdo que si los bomberos en Hermosillo que reciben un sueldo del municipio, deberían de contar con mejores prestaciones, servicios médicos y los mejores planes para el retiro, tiempo más corto para jubilarse y con el 100 por ciento de sus sueldos para el retiro.
“Deberían de tener los mejores sueldos, porque nuestra profesión es una de las más peligrosas del mundo, según las estadísticas, por los problemas que nos enfrentamos cada día, por la cuestión de salud, trabajo arduo, bomberos muertos por ataques al corazón, por ejemplo, por eso estoy de acuerdo que le exijamos a nuestros gobiernos y representantes”, agregó.
Hernández Domínguez pidió que las autoridades, desde Gobierno del Estado, municipios y legisladores, trabajen para que los bomberos cuenten con recursos públicos etiquetados cada año, que no se destine para protecciones civiles o secretarías de ayuntamientos, que sean enviados a bomberos, porque, al depender de otras instancias, muchas veces no llegan los recursos o se desvirtúan.
“Ojala que nuestros gobernantes nos tomen en serio y nos volteen a ver, que no solo nos miren cuando existan incendios o tragedias, es el pan de cada día de nosotros y necesitamos de buen equipamiento, capacitación, herramientas, carros de bomberos y las ganas o voluntad ahí están, pero eso no apagan incendios ni atienden emergencias”, comentó.
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