El Diario de SonoraHermosillo, Son
Un inicio de con dificultades tuvieron las nuevas dos empresas operadoras del transporte público, luego de que exconcesionarios bloquearon la salida de las unidades.
Lorena Cota, concesionaria por más de 28 años, indicó que la manifestación fue para exigir la restitución de las concesiones o el pago de la rentabilidad de las unidades en servicio, y de las instalaciones y equipamiento de las oficinas.
Señaló que en 2007 el Gobierno del Estado, con Eduardo Bours Castelo al frente, obligó a los concesionarios a conformar la empresa Sictuhsa y que ahora el gobierno en turno debe regresar las concesiones.
“Un decreto no autoriza a ningún gobernador a quedarse con una propiedad privada, la Ley 149 marca cómo se revocan las concesiones y no se hizo bien”, expuso.
Puntualizó que desde que se hizo la requisa de unidades en septiembre del año pasado los 300 concesionarios suman siete meses de no recibir pago, lo que representa un adeudo para el Gobierno de alrededor de 50 millones de pesos.
Por su parte el titular de la Dirección General de Transporte, Carlos Morales Buelna, señaló que la manifestación fue orquestada por los antiguos lideres de Sictuhsa, quienes tuvieron el control del transporte y lo llevaron a la quiebra.
Refirió que el Gobierno del Estado no está obligado a pagar la rentabilidad de las unidades porque la dependencia a su cargo se encarga de pagar el sueldo de los operadores, el combustible, prestaciones y deudas anteriores.
“Cuando el Gobierno del Estado toma la responsabilidad del transporte no está obligado a pagar absolutamente nada porque nosotros estamos pagando todo”, expresó.
Calificó como boicot a las nuevas empresas el bloqueo de la salida de las unidades y lamentó la situación argumentado que el más perjudicado es el usuario.
Para mitigar la falta de unidades, la DGT comunicó que se pusieron disposición de la ciudadanía 60 camiones de personal especializado y 300 taxis que prestaron servicio de manera colectiva.
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