A la espera de que se resuelva su situación para buscar regresar a Estados Unidos o retornar a su país de origen, se encuentra en Hermosillo el grupo de migrantes venezolanos que fue deportado por Nogales, Sonora, y trasladado a las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM) en la capital del estado.
Yoer Colmenares, quien fue deportado a México por las autoridades migratorias norteamericanas el pasado lunes, puntualizó que actualmente son alrededor de 600 migrantes los que están en Hermosillo distribuidos en el albergue Casa Amiga, a un costado del Parque Madero; comedor del Migrante, en la colonia San Luis; y en las plazas del centro de la ciudad.
Indicó que, a más de un mes de haber emprendido el sueño americano, la situación económica para él y sus compañeros es complicada para la asistencia en el albergue y la alimentación, por lo que se han visto en la necesidad de vender dulces en las calles del centro.
“Muchos se están quedando en la plaza porque no tienen dinero, otros estamos en un refugio que pagamos 40 pesos y nos sacan a las 05:00 de la mañana, otros están en la otra plaza; yo calculo sin decirle mentiras, alrededor de 600 a 500 personas y siguen llegando más; yo para poder pagar mi renta vendo caramelos para que no digan que uno anda haciendo lo malo”, expresó.
Con el propósito de sentirse un poco aseado luego de varios días en situación de calle, dijo que esta mañana visitaron el Banco de Ropa, donde los atendieron muy bien y les proporcionaron prendas limpias.