Conducción distraída: el dolor de una madre impulsa la lucha por la seguridad vial en Arizona

En Arizona, una organización sin fines de lucro llamada Phones Down, Just Drive está llevando a cabo una importante labor para concientizar sobre los peligros de la conducción distraída. Su historia, sin embargo, no es simplemente un llamado a la responsabilidad, sino un grito desgarrador proveniente del dolor de una pérdida irreparable.
La iniciativa nace de la tragedia que marcó la vida de Julie Festerling. El 13 de noviembre de 2019, su hija, Caitlin Festerling (21 años), y el novio de ésta, Paul Garcia (22 años), perdieron la vida en un accidente causado por un conductor distraído, que estaba enviando mensajes de texto. El incidente ocurrió en la intersección de Shannon y Lambert en Oro Valley. “Ellos piensan: ‘es solo un mensaje inocente, un video corto, una videollamada rápida; a mí no me pasará’”, cuenta Julie con la voz quebrada, recordando las palabras de quienes minimizan el riesgo. “Pero sí pasa. Y nosotros nunca pensamos que nos pasaría a nosotros”.
Las cifras son alarmantes. Según el Departamento de Transporte de Arizona (ADOT), en 2022 se registraron 8,988 accidentes automovilísticos atribuidos a la conducción distraída, con 57 muertes. Una realidad que impulsa a Phones Down, Just Drive a intensificar sus acciones.
Con el objetivo de transformar su dolor en un propósito, Julie Festerling, junto con la madre de Paul, han creado una estrategia integral. Esto incluye:
La lucha contra la conducción distraída continúa. Es una batalla por la seguridad vial, una batalla librada desde el dolor, pero con la firme esperanza de prevenir nuevas tragedias.