Según "la capacidad de recuperación de los centenarios es asombrosa", afirma George Murphy, biólogo de células madre de la Universidad de Boston. Un ejemplo de esto es el caso de un centenario que se recuperó de la gripe española de 1912 y del COVID-19 en dos ocasiones. Esto ha llevado a los investigadores a teorizar que los centenarios poseen una constitución genética que los protege de enfermedades.
La creación de un banco de células de centenarios es un proyecto ambicioso que busca proporcionar una herramienta valiosa para la investigación en el campo de la longevidad. Este banco de células permitirá a los científicos estudiar los factores genéticos que contribuyen a la longevidad, afirma Chiara Herzog, investigadora en epigenética y envejecimiento en el King's College de Londres.
Para lograr este objetivo, los investigadores han colaborado con Tom Perls, médico especializado en geriatría, quien dirige el estudio más grande de personas de 100 años y más, el New England Centenarian Study. Juntos, han buscado centenarios en listas de registro de votantes, artículos de noticias y centros de cuidado a largo plazo. Muchos de ellos han participado voluntariamente en el estudio, "porque saben que son especiales", afirma Perls.
Los participantes fueron evaluados en cuanto a sus habilidades cognitivas y físicas, y se les tomaron muestras de sangre. Muchos de ellos resultaron ser cognitivamente sanos y capaces de cuidar de sí mismos. A partir de la sangre de unos 30 centenarios, los investigadores lograron aislar células sanguíneas y revertirlas a un estado pluripotente, lo que les permitió convertirlas en cualquier tipo de célula del cuerpo.
Las células madre inducidas (iPS) pierden muchos aspectos de su "edad" a través del proceso de reprogramación sin alterar su código genético. Esto permite a los investigadores utilizar estas células para estudiar los determinantes genéticos del envejecimiento, afirma Herzog.
La creación de este banco de células de centenarios es un paso importante hacia la comprensión de la longevidad y la salud en la vejez. Este recurso valioso permitirá a los científicos avanzar en la investigación y descubrir nuevos secretos sobre la longevidad.