Durante un evento en vivo, la compañía demostró cómo la herramienta ahora puede simular movimientos físicos con mayor precisión: "Es notable cómo interpreta la gravedad o el impacto de objetos, aunque aún hay detalles por pulir", admitió un investigador. Ejemplos públicos muestran desde acrobacias en skate hasta escenas fantásticas con dragones, aunque algunos errores —como un bastón que pierde su forma— revelan los límites actuales.
La verdadera innovación está en tres aspectos clave:
- Cameos digitales: Los usuarios podrán insertar su avatar en videos mediante una grabación única de voz y rostro.
- Feed inteligente: Un algoritmo curará contenido basado en interacciones, con opciones de personalización avanzada.
- Síntesis de voz: Capacidad ausente en el modelo anterior que ahora permite narraciones autogeneradas.
Detrás del entusiasmo hay medidas de seguridad reforzadas. Cada video llevará marcas de agua y metadatos que identifican su origen IA, mientras que los
controles para menores incluyen límites de tiempo y supervisión parental. La polémica función de cameos requerirá consentimiento expreso, revocable en cualquier momento.
Pese a estar disponible en iOS, el acceso sigue siendo por invitación, con planes de expansión gradual en Norteamérica. OpenAI reconoce que la demanda podría superar su capacidad de procesamiento: "Estamos considerando opciones de pago para generaciones adicionales", señalaron, dejando entrever los desafíos técnicos que implica mantener este tipo de plataformas.
Mientras los primeros usuarios experimentan con la app —como el científico que se viralizó al aparecer junto al CEO Sam Altman en escenas surrealistas—, la compañía amplía su equipo de moderadores humanos. El objetivo: filtrar contenido violento, sexual o de autolesión antes de que se publique, aunque admiten que el sistema "dista de ser perfecto".
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Xavier Rivera Martinez
el 30/09/2025 01:08 PM.
