LOS ANGELES, Cal
‘Tyson’ Márquez y Brian Vilora están en los pesos ‘selectos’.
En el mundo del boxeo siempre ha sido una premisa de que mientras de más peso sean los peleadores, mayor será la bolsa que ganen.
Controversial esta regla no escrita, es considerada injusta porque, por lo general, las mejores peleas las disputan boxeadores de menor peso.
No obstante, en los últimos años, las divisiones intermedias son las que acaparan el negocio, desde que los estadounidenses no figuran en los pesos completos y la parte final de la carrera de Julio Cesar Chávez fue alcanzada por las trayectorias de Oscar de la Hoya, Floyd Maywerather Jr. y Manny Pacquiao.
Pero que una pelea menor a los pesos gallo genere tanta expectativa, representa una situación gratamente extraña, una de esas ocasiones en que es muy raro que ocurra, pero qué bueno que así sea. Por el bien del espectáculo y de sus protagonistas.
Este sábado 17 en el Sports Arena de Los Ángeles, el campeón mundial mosca AMB, el mexicano Hernán “Tyson” Márquez (34-2-0, 25 KO´s) unificará su cetro con el campeón mundial mosca OMB, el estadounidense Brian Viloria (31-3-0, 18 KO´s).
Cada uno de los peleadores se ha encargado de ser figura en plazas importantes, y son considerados campeones mundiales sólidos. Viloria es un boxeador muy respetado, con gran presencia e impacto en Estados Unidos y Filipinas, y el “Tyson” es el nuevo ídolo del boxeo mexicano.
Aunque a lo largo de la historia han existido importantes figuras del boxeo mexicano, con trascendencia mundial, que han sido campeones en divisiones menores a gallo, para Estados Unidos esta situación no es muy común.
De ahí que la primera confrontación de este tipo que fue un éxito boxístico y comercial, se dio con el enfrentamiento entre Humberto “Chiquita” González y Michael Carbajal.