TIJUANA, BC
Martínez y Aguilar logran goles para superar a los Diablos Rojos.
El ecuatoriano Fidel Martínez y el paraguayo Pablo Aguilar anotaron un gol cada uno el jueves por la noche y Tijuana se impuso 2-1 al Toluca en el juego de ida por la final del torneo Apertura mexicano.
Martínez abrió la cuenta a los 23 minutos, pero el paraguayo Edgar Benítez empató el encuentro a los 26, antes de que Aguilar consiguiera el tanto del triunfo a los 39 minutos.
Con el resultado, Tijuana requiere un empate el próximo domingo en el estadio Nemesio Díez para conseguir el primer campeonato de su historia, apenas un año y medio después de conseguir el ascenso.
Sólo Pachuca, que ascendió en 1998 y se coronó en el Invierno 99 se ha coronado tan rápido.
Dirigidos por el argentino Antonio Mohamed, los Xolos de la fronteriza Tijuana fueron una revelación esta temporada en la que sólo perdieron un partido en toda la campaña regular y terminaron como segundos de la clasificación.
Toluca necesita vencer al menos por un gol para forzar el alargue si es que espera ganar el undécimo cetro de su historia, con lo que empataría a las Chivas como el equipo más ganador en el país.
Los Diablos Rojos están en su primera final desde el Clausura 2010, cuando se coronaron por décima ocasión para empatar al América como segundo equipo más laureado en el país.
El primer tiempo arrancó con un dominio de la pelota de Tijuana que tuvo poca profundidad, pero logró irse al frente cuando el argentino Cristian Pellerano le mandó un buen pase a Martínez, quien sólo por el centro del área logró anotar con un tiro suave que se fue entre las piernas del portero Alfredo Talavera.
La igualada vino casi de inmediato cuando el brasileño Lucas Silva mandó un centro por la banda derecha que cruzó por toda el área y Benítez llegó por izquierda para empujarla al fondo de las redes.
Los Xolos retomaron la delantera en una jugada a pelota parada en la que Fernando Arce mandó un centro por derecha, el estadounidense Joe Corona la desvió con la cabeza y Aguilar la empujó a dos metros de la portería.
Las repeticiones de televisión mostraron que el paraguayo estaba en fuera de lugar.
En la segunda parte, Tijuana insistió en busca de un tercer tanto ante unos Diablos Rojos que apostaban al contragolpe. La llegada más clara de los locales fue a los 58, cuando el colombiano Duvier Riascos sacó un disparo que se fue apenas por encima de la portería de Talavera.