BUENOS AIRES, Arg
Mal en el torneo local, los Diablos Rojos van a casa de los argentinos.
Boca Juniors argentino comenzará este miércoles ante el Toluca mexicano la búsqueda de un desquite tras la derrota en la final de la Copa Libertadores de 2012 ante el brasileño Corinthians, en el partido de la jornada inicial del grupo I de la competición, en ‘La Bombonera’.
Finalizado aquel encuentro, el futbolista símbolo de los boquenses, Juan Román Riquelme, se alejó del club de sus grandes éxitos, y siete meses después, horas antes de este partido con los mexicanos, regresó a casa aunque no jugará hasta el mes próximo.
Boca Juniors vuelve a la Libertadores con el entrenador Carlos Bianchi, con el que ganó tres veces el torneo (2000, 20001 y 2003) y en el que la afición auriazul deposita toda su esperanza de un nuevo triunfo, por encima de los futbolistas del equipo. En la Liga argentina el equipo remontó el sábado en casa ante Quilmes un 0-2 y ganó por 3-2 en la jornada inicial, victoria a la que Bianchi atribuyó al “orgullo” de sus jugadores, con el que superó un descalabro táctico digno de análisis para su corrección inmediata. El primer partido oficial Boca en 2013 generó al entrenador el estudio de un probable cambio en la alineación, con el uruguayo Ribair Rodríguez en lugar del juvenil Leandro Paredes en la mitad del campo, para reforzar sus posibilidades de contención del juego en ese sector.