PEORIA, Az
El nuevo millonario arriba a las prácticas de los Marineros.
Lo que sea que digan las críticas en su país natal sobre Félix Hernández, parecían ya muy lejanas el viernes cuando el lanzador estrella se reportó al campamento de primavera de los Mariners.
En los vestuarios y en el campo, Hernández no parecía escuchar o ver la reacción de los aficionados en su natal Venezuela, quienes están decepcionados que haya optado por perderse el Mundial de Béisbol para quedarse con su equipo.
Hernández estaba feliz y contento como siempre, en el vestuario en la mañana, sonriendo y saludando a sus compañeros y entrenadores ante una pequeña horda de aficionados en el complejo de los Mariners una vez que empezaron a trabajar.
Con su contrato de siete años por 175 millones de dólares recién firmado el miércoles, que lo convirtió en el lanzador mejor pagado de las Grandes Ligas, Hernández dijo que se sentía bien en el campo con el equipo. Sus compañeros lo inundaron con peticiones de préstamos y le hicieron bromas sobre cómo lloró al firmar su contrato en televisión nacional.
“Estaba jugando. Ellos son grandioso”, dijo Hernández.
El venezolano dijo que la recepción de su nuevo contrato ha generado sentimientos encontrados en su país.