Tiburones se afianzan

VERACRUZ

Dos goles de Angel Reyna para superar al Cruz Azul y se mantienen como súper líderes.

Con par de anotaciones de Angel Reyna, la primera por una pena máxima regalo del árbitro, de mal desempeño, Veracruz se impuso 3-2 al Cruz Azul, para cortar una racha de siete derrotas en fila ante los celestes y afianzarse en la cima general.
Angel Reyna consiguió su sexto tanto del certamen en una pena máxima regalo del árbitro en el minuto 56 e hizo su séptimo al 71, en contrarremate luego que Jesús Corona le detuvo un segundo penal, mientras que Jehu Chiapas, hizo el segundo de Tiburones Rojos a los 66.
Pablo Barrera adelantó en el 30, con un golazo en remate de tres dedos dentro del área de meta por derecha, mientras que Adrián Cortés hizo un autogol al 90, para darle vida a su ex equipo, tras una pena máxima que Edgar Melitón Hernández le detuvo a Christian “Chaco” Giménez.
Los escualos alargaron su paso invicto en el certamen, llegaron a diez puntos y se afianzaron en la cima de la clasificación, en tanto que los Cementeros, perdieron su segundo juego en fila como visitantes, el cual terminaron con dos expulsados, Israel Castro y Sergio Javier Nápoles.
Apenas comenzaba el partido y Jehu Chiapas regaló una oportunidad al argentino Hugo Mariano Pavone, quien tras eludir al arquero Edgar Melitón Hernández mandó su tiro por un costado, falla que permitió a los escualos reaccionar para generar algunas llegadas.
Angel Reyna buscaba manejar el balón para los del puerto, quienes pese al empeño no lograron superar a la escuadra cruzazulina, que primero trató de ordenarse bien atrás, para después atacar. Tuvieron los visitantes varias aproximaciones, donde faltó claridad en el penúltimo toque, para que el marcador siguiera sin moverse, aunque tenía atenta a la afición.
Fue a los 30 minutos, cuando se abrió la cuenta, en un desborde de Pablo Barrera por derecha, cuyo intento de servicio raso fue rechazado por Oscar Mascorro, el balón cayó otra vez al volante celeste, quien bombeó con ejecución de tres dedos para batir a Hernández.

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