Una nueva estrella despierta en NBA

OAKLAND, CAL

Si quería encontrar pruebas de que se antoja barato que Klay Thompson esté cerca de ganar 70 millones dólares, usted no necesita únicamente apoyarse en su récord personal de 41 puntos en la noche del sábado, cuando los Golden State Warriors apalearon a Los Angeles Lakers. Usted podría incluso mirar la jornada de apertura en contra de los Sacramento Kings. Eso podría ser contrario a la lógica, pero ese rendimiento fue sólo un indicativo de un jugador que es distinto.
En el juego inaugural Thompson compensó la mala puntería en los lanzamientos de campo concretando los 10 tiros libres que realizó, una habilidad que no había sido tradicionalmente su fuerte (en la serie de playoff en 2013 ante los Spurs apenas llegó a la línea de libres en una ocasión). El sábado Thompson embistió desde la banda con nueve tiros, esta vez, cuando los disparos sí cayeron, los tiros libres extras le ayudaron a conseguir 23 puntos. Era difícil eclipsar una brillante faena de 31-10-5 de Stephen Curry esa noche, pero eso fue lo que hizo Thompson al atacar repetidamente la defensa interior de Los Ángeles.
Las estadísticas no reflejan mucho entusiasmo con Thompson, un jugador cuyo conjunto de habilidades es mejor que su producción. Algunos podrían incluso burlarse de Golden State por entregarle una cantidad máxima a alguien que todavía está por debajo del radio de eficiencia de un jugador (PER, por sus siglas en inglés). Muchos, de hecho, se han burlado de la franquicia por no cotizar a su joven escolta por el siempre eficiente Kevin Love.
Thompson busca cambiar su juego, lo que podría cambiar la narrativa. Lograr mayor eficiencia ha sido una constante para él, como indicó en la conferencia de prensa que se celebró para anunciar su nuevo y lucrativo contrato.