River escapa con el empate

MONTERREY, NL.

Tigres no aprovecha la localía y deberá ir a ganar a Buenos Aires.
En un encuentro de escasas oportunidades de gol, River Plate de Argentina sacó un valioso empate de 0-0 ante Tigres de México el miércoles por la noche, en el choque de ida por la final de la Copa Libertadores.
Los universitarios, apenas el tercer equipo mexicano en una final del torneo continental, sólo generaron un par de jugadas claras de gol y no pudieron sacarle provecho a su condición de local.
River Plate, que está en su primera final en 19 años y va por el tercer cetro de Libertadores en su historia, recibe el partido de vuelta el próximo miércoles en el Monumental.
Fue el tercer empate entre los dos equipos en esta edición de la Libertadores. Ambos fueron parte del Grupo 6 y empataron previamente 1-1 en Argentina y 2-2 en esta ciudad.
“Me voy tranquilo, tuvimos buenas oportunidades de gol pero no concretamos. La verdad queríamos irnos mejor a Buenos Aires, pero estamos tranquilos”, dijo el volante uruguayo de Tigres, Egidio Arévalo. “Allá tenemos que estar tranquilos porque ellos van a buscar hacer un gol de entrada. Debemos saber que está todo igual y tenemos las mismas posibilidades porque se puede ganar en Argentina”.
La primera parte fue dominada por los mexicanos, que tuvieron las mejores oportunidades de gol. La primera vino cuando Jürgen Damm mandó un centro por derecha que fue desviado por un zaguero y la pelota se estrelló en el travesaño a los 17 minutos.
Tres minutos después, Damm volvió a desbordar por derecha y mandó centro al corazón del área, donde el brasileño Rafael Sobis conectó un remate de cabeza directo a las manos del portero Marcelo Barovero.
En el inicio del complemento, River Plate comenzó más agresivo y estuvo cerca de generar peligro cuando Rodrigo Mora entró al área y cuando se preparaba a tirar a puerta, el zaguero José Rivas se barrió para evitar el peligro.
Tigres no volvió a generar peligro hasta los 78, cuando el brasileño Juninho sacó un disparo desde fuera del área que fue desviado con algunos apuros por el arquero sudamericano.
La mejor llegada del encuentro vino a los 83, cuando Damm quedó solo frente al portero luego de un rebote, pero en lugar de tirar, intentó eludir al arquero y no pudo concretar.

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