Batalla en el Oeste

NUEVA YORK.
Broncos y Jefes se disputan el segundo puesto la noche del domingo.
Las defensivas pondrán orden en el Oeste de la Conferencia Americana el domingo, cuando los Jefes de Kansas City visiten a los Broncos de Denver. O al menos eso es lo que se anticipa.
Los Jefes, que vieron rota una racha de cinco victorias la semana pasada, no han permitido más de 21 puntos en sus últimos seis encuentros, mientras que los Broncos, promedian 17 puntos en contra en sus tres victorias en los últimos cuatro partidos. Queda claro que Trevor Siemian, quarterback de los Broncos, y Alex Smith, pasador de los Jefes, no tendrán un día fácil en una jornada a la que ambos equipos llegan empatados en el segundo lugar de su división con marca de 7-3.
Los campeones Broncos han ganado siete de los últimos ocho enfrentamientos ante Kansas City, pero la ofensiva de Denver ha entregado siete balones en sus últimos tres partidos y se enfrenta a unos Jefes especialistas en el intercambio de balones, al encabezar la NFL con un índice de +13.
Pero Smith, que no ha perdido en sus últimos ocho juegos divisionales, tiene los mismos problemas. Sólo cuenta con dos pases de touchdown y dos intercepciones en sus últimos tres partidos, y el ataque terrestre de los Jefes no ha superado las 100 yardas en sus últimos cuatro juegos, complicándole aún más la vida a un pasador que nunca se ha caracterizado por su verticalidad, especialmente ante la cuarta mejor defensiva en yardas de la NFL.
Empacadores urgidos
Dos equipos que iniciaron la temporada pensando en grande han perdido aire últimamente y ahora se aferran a la vida. Uno de ellos recibirá el lunes un golpe del que tal vez sea imposible reponerse.
Las Aguilas (5-5), que iniciaron la campaña con tres victorias consecutivas, han perdido tres de sus últimos cuatro cotejos en la campaña de debut del quarterback Carson Wentz y del coach Doug Pederson. De igual forma, los Empacadores (4-6), que llegaron a la temporada 2016 con etiqueta de Super Bowl, acumulan cuatro derrotas consecutivas de la mano de una defensiva que ha permitido 153 puntos en ese lapso.
Cuatro de las seis derrotas de Green Bay han sido fuera de casa, incluyendo las últimas dos —en que han permitido al menos 42 puntos en cada una_, y ahora visitan a unas Aguilas que han hecho de Filadelfia su cuartel y salvavidas al mantenerse invictos en su patio, incluyendo triunfos ante Pittsburgh, Minnesota y Atlanta, todos en el panorama de postemporada.
Para los Empacadores, sólo hay una opción: Corregir los problemas defensivos, o al menos limitarlos, para darle a Aaron Rodgers una oportunidad de mantener al equipo a flote en una División Norte de la NFC sin claro favorito. Las Aguilas, aunque inconsistentes en ataque, gozan de una estupenda defensiva que ha permitido tan solo 38 puntos en sus cuatro juegos de local, pero tiene un panorama mucho más complicado en un Este de la NFC en el que se encuentran en el sótano aún con marca de .500.