A lo largo de los años, las aguas de las fosas de clavados han sido el sitio donde la delegación mexicana acude religiosamente a recoger medallas en los Juegos Olímpicos, y París 2024 no debe ser la excepción.
Será el lunes cuando los mexicanos comiencen a buscar ratificar su condición de potencia mundial en la disciplina cuando Randal Willars y Kevin Berlín participen en la plataforma sincronizada de 10 metros para hombres.
La disciplina que más preseas ha otorgado al país a lo largo del tiempo en las justas de verano se pondrá en marcha el sábado con la prueba sincronizada de tres metros para mujeres, la única en la que México no tendrá representante en esta ocasión.
“Para mi serán mis segundos Juegos Olímpicos, creo que tengo posibilidades de ganar esa medalla que he soñado de pequeño y confío en el trabajo que hemos hecho para lograrlo”, dijo Berlín, quien en Tokio 2020 quedó en el cuarto puesto compitiendo junto Diego Balleza.
Compitiendo junto con Willars en la misma prueba, Berlín consiguieron una medalla de bronce en el Mundial de Fukuoka 2023 y quedaron cuartos en la edición de Doha en este año.
Además, Berlín tiene una presea de bronce en plataforma mixta de 10 metros en el Mundial de 2024.
“Randall y yo tenemos buenos resultados, lo mostramos en Fukuoka, además ganamos el oro en (los Juegos Panamericanos) Santiago 2023, así que hay que hacer lo mismo que hacemos siempre, salir a dar lo mejor”, agregó Berlín.
Otra pareja que genera mucha expectativa en la plataforma es la conformada por Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez, quienes buscan repetir podio luego de conseguir una medalla de bronce en Tokio 2020.
La pareja buscará ese logro el próximo miércoles.
“Tenemos una responsabilidad histórica de regresar con una medalla porque clavados es el deporte que más ha dado en la historia”, dijo Agúndez. “Nosotras como clavadistas lo sabemos y siempre venimos con esa responsabilidad y ese compromiso”.
Además de ser candidata a una medalla en el sincronizado, Agúndez ha mostrado que tiene la capacidad para soñar con una en la individual de 10 metros donde fue cuarto puesto en el Mundial de Fukuoka 2023.
Otro saltador que llega a París 2024 como un candidato al podio es Osmar Olvera, quien buscará dar un campanazo ante los chinos en el trampolín de tres metros individual y además buscará otra presea en el sincronizado.
Olvera, de 20 años, conquistó una medalla de plata en Fukuoka 2023 relegando a un chino al tercer sitio y este año logró un bronce.
“Todos sabemos que China es una potencia y que el objetivo es ganarles, vengo poco detrás de ellos, pero he visto que no son invencibles, ya he estado cerca de vencerlos”, advirtió el mexicano. “Se necesitan unos 500 puntos para una medalla y unos 530 para ganarles, se ve difícil, pero no es imposible”.
El saltador mexicano estará en sus segundos Juegos Olímpicos. En Tokio 2020, siendo el más joven del equipo, culminó 14to.
Además de la prueba individual, Olvera competirá en el sincronizado junto con Juan Celaya, quien se ganó su sitio a última hora en el control realizado previo a los Juegos.
Hace tres años, Celaya se quedó cerca de subir al podio al terminar cuarto en la prueba junto a Yahel Castillo.
“Para mí los días previos han sido especiales y me han servido para ver dónde me ubico porque conmigo entrenan medallistas mundiales y olímpicos. Eso no lo puede decir cualquiera”, aseguró Celaya.
En su historia olímpica, los clavados le han dado a México un total de 15 medallas. Los clavadistas superan al boxeo, que tiene 13, y que por muchos años fue la disciplina más proveedora de metales. La última vez que los mexicanos no sacaron al menos una medalla de las fosas de clavados olímpicas fue en Atenas 2004.